Este domingo ha sido el primer día de la historia sin billetes de papel para los aviones. Aunque en la mayoría de los casos ya se venía usando, el uno de junio ha sido la fecha oficial en la que el papel ha pasado a la historia de los billetes de aviación.
Según leo en BajoCoste.com, la medida supondrá un ahorro para las compañías de unos 3.000 millones de euros anuales, que no es moco de pavo y más dada la situación en la que están por el coste del petróleo. También se supone que supondrá evitar la tala de unos 50.000 árboles cada año; siempre, eso sí, que no sigamos la recomendación de las aerolíneas de imprimir en casa nuestros billetes.
Está bastante claro que es más práctico y aunque sólo sea por la posibilidad que teníamos de perderlo vale la pena decir adiós al papel, aunque les tengo que confesar que yo echaré de menos guardar los billetes como recuerdo de mis viajes.
También dedican un post al tema en Viaja Blog.