Zen Asian Supper Club, la apuesta más informal y divertida para disfrutar del tardeo y la noche madrileña

Zen Asian Supper Club es la nueva propuesta de Roger Chen para borrar los límites entre el día y la noche y entre la comida y la bebida. Yo la hace gracias a un ambiente en el que la diversión y la música importan tanto como la propuesta culinaria.

Ubicado en el número 128 de la calle Velázquez -casi esquina con María de Molina- su enorme neón te adentra en Asia con un nuevo concepto que empieza con una zona de barra con algunas mesas óptimas para un picoteo informal con la opción de copa y de la que parten las escaleras a la planta principal, todo ello coronado por unas majestuosas lámparas que te siguen trasladando al Lejano Oriente.

Su inauguración hace más de un mes sirvió para que comprobáramos de primera mano esta apuesta con una decoración de estilo oriental cuidada al detalle, con antigüedades traídas de China, y varios ambientes aptos para todos los públicos, especialmente para los que busquen algo más que una comida o cena.

Extensa propuesta gastronómica

Ya sentado en el salón principal comienzas con un delicioso entrante de spicy edamame, ligeramente aderezados con ajos y chiles que le dan un sabor espectacular. También hay que destacar el tartar de atún acompañado de aguacate, mango, algas wakame y caviar tobiko. Esta combinación de ingredientes convierte cada bocado en una combinación perfecta de sabores entre los alimentos marinos y los de la tierra.

Roger Chen, natural de China y formado en Holanda, ha querido romper moldes a través de un concepto sofisticado y cosmopolita que se posiciona como el local más nocturno, dinámico, sofisticado y divertido del Grupo Zen, que cuenta con otros diez establecimientos en la capital.

Prueba de ello es el lounge, un espacio con mesas bajas arropadas por la mágica locura de luces de colores que se mueven al ritmo de la música y con una mesa de DJ que funciona desde el mediodía hasta la noche de forme ininterrumpida. Los sonidos que parten de ella, y que reverberan en el resto del local, varían de estilo y de intensidad, al igual que la iluminación, según la hora del día. "La idea es potenciar la sobremesa, el tardeo y las copas de después de cenar, hasta las 2 de la madrugada", explica Chen.

Con este ambiente metido en el cuerpo que te invita a levantarte de la mesa y pedir una copa, o un cóctel realizado al momento en una de las barras de la sala, probamos una tabla de sushi variado con nigiris y makis, realizados también en el acto en la otra barra del local. En general ricos pero de un tamaño algo grandes para metértelos de un bocado. Las gyozas de pollo con vinagreta de soja están mucho mejor y la carne con la salsa ligan a la perfección en tu paladar.

El menú de Zen Asian Supper Club es un viaje por el sudeste asiático, con especialidades gastronómicas japoness, chinas, tailandesas o vietnamitas. De ahí los rollitos crujientes Nem, acompañados por la hoja de lechuga, la menta y la salsa para que no se pierda ningún sabor al degustarlo.

La gamba tempurizada cremosa es un bocado típico que no pasa desapercibido con su rebozado ligeramente picante y los anacardos que la acompañan. Y para fin de fiesta, como no podía ser de otra forma en este viaje asiático, el pato laqueado estilo Pekín, con pepino y salsa hoisin para ponerlo en la oblea y poder disfrutar de esta delicia culinaria china.

Menús para todos los gustos

Zen Asian Supper Club, que también cuenta con una amplia terraza interior, ofrece una carta variada y asequible, con un ticket medio de 35 €, que se adapta a todos los gustos y momentos y que incluye especialidades chinas, japonesas y del sudeste asiático. También cuentas con la opción de distintos tipos de menús cerrados desde los 22€ a los 62€, con posibilidad este último de pedir la mitad por 36€.

Completa la oferta una cuidada carta de bebidas que puede disfrutarse a todas horas y que incluye 50 referencias de vinos, copas bien servidas y, como hemos señalado, una selección de cócteles clásicos con un toque oriental. Sin duda es una propuesta gastronómica que no te dejará indiferente. Disfrutarás de su comida y bebida, de su ambiente y de su decoración hasta que tu cuerpo aguante.

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