Después de tomar la dura pero valiente decisión de cerrar Punto MX, primer restaurante mexicano con Estrella Michelín en Europa, y tras el éxito cosechado en Madrid con Barracuda MX Roberto Ruiz se lanzó a abrir Mantarraya MX en Marbella. El propio chef asegura a Libertad Digital que "no fue nada fácil, pero fue una suma de situaciones que nos hicieron tomar esta decisión y que hoy vemos en la distancia como la mejor que podíamos haber tomado en ese momento".
Este nuevo restaurante quiere ser una referencia para descubrir el alma y los sabores del Pacífico mexicano. Una auténtica fiesta que recorre los casi 8.000 kilómetros de aquel litoral de norte a sur: desde Ensenada y Baja California hasta Chiapas.
Según Roberto, la cocina que elabora está "llena de matices, de sabores, de potencia. Es una cocina muy nítida, inmediata, ya que no necesita de grandes elaboraciones. Además, yo tuve la oportunidad de vivir un tiempo en Mazatlán (Sinaloa) y creo que es una cocina que era muy desconocida fuera de México". Por ello recomienda probar platos que no son los típicos que podemos encontrar en cualquier restaurante mexicano.
Empezamos con una ostra con salsa de chiles fermentados y granizado de maracuyá que ya te mete de lleno en la espectacular cocina de Roberto Ruiz. La mezcla del sabor yodado de la ostra con el sutil picante de los chiles y el frescor de la fruta te deja un extraordinario sabor en tu boca.
También nos recomienda el guacamole Mantarraya con vieiras y emulsión de chiles jalapeños. Te lo comes con los totopos caseros y te vas encontrando la vieira laminada que combina de una forma exquisita con el aguacate y el suave picor de los jalapeños emulsionados.
Dicha ubicación junto con el clima característico de Marbella y la cercanía al mar hace que pueda aprovechar todo lo que ofrezca el mar. De hecho, cuenta Roberto que el elegir este enclave lo vio "como una oportunidad, ya que no había un restaurante mexicano con estas características y creíamos que era muy oportuno con nuestro tipo de cocina actual, la cocina del Pacífico". De hecho la carta irá evolucionando en función de la estacionalidad, aunque hay platos que se quedarán.
El chef mexicano encuentra la inspiración para sus platos en "la experiencia de haber vivido en Mazatlán y, por otro lado, en llevar 17 años en España. Esa mezcla de culturas, técnicas y de ingredientes hace que sea muy fácil inspirarse. Intentamos cruzar ambas culturas y así conseguir una cocina muy personal".
Muestra de ello es el aguachile Vuelve a la vida con vieiras, langostinos y pulpo macerados en chile chiltepín, cilantro y lima. El aguachile es como el típico ceviche pero no necesita estar horas macerando, se prepara y se consume en el momento. Te lo comes sobre unas tostas cuya combinación de nuevo te sorprende gratamente.
Pero para deleite, el taco de carabinero a la diabla con salsa enchipotlada, guacamole y pico de gallo. Te avisan que la cabeza la puedes chupar o puedes sacar su jugo en el propio taco. Decido hacer esto último y envolverlo para degustar una perfecta combinación de sabores de un taco excelso.
Y para fin de fiesta el icónico tuétano a la brasa con tostadas de atún rojo toreado y emulsión de chiles serranos de Barracuda MX que también puedes degustar en el restaurante de Marbella. La untuosidad del tuétano, junto con el atún rojo y el picante de los chiles convierte cada mordisco en una auténtica fiesta.
No podían faltar los clásicos cócteles mexicanos con sus margaritas y micheladas, así como una amplia carta de vinos y espumosos.
El restaurante, ubicado en la marbellí Avenida Bulevar Príncipe Alfonso de Hohenlohe, 269, te da la bienvenida con una amplia sala con cocina vista y donde se combinan materiales nobles con otras piezas tradicionales para generar una atmósfera de sofisticación sin pretensiones. Desde ahí, se llega a la terraza de invierno, cuyo techo hace sentirse como en un paradisiaco refugio gracias a los elementos naturales que lo recubren. Más adelante, se accede a la impresionante terraza, que cuenta con su zona de bar con mesas altas, y otra parte de restaurante donde abunda la vegetación. Sin duda un paraíso visual y gastronómico del Pacífico a orillas del Mediterráneo.
Como curiosidad, "el nombre de Mantarraya MX surge de la idea de continuar con animales característicos del Pacífico. Además, coincide que tanto Barracuda MX como Mantarraya MX tienen "RR" y mis iniciales son RR (Roberto Ruiz), así es un doble juego", explica el chef. Esperemos que pronto se amplíe la familia de Pacífico MX.
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