Cuando se acercan las vacaciones de verano muchas mujeres, y en ocasiones algunos hombres, empiezan a realizar dietas extremas que pueden llegar a ser peligrosas debido a que buscan encontrar su mejor físico de cara a las vacaciones en la playa.
Sin embargo, las famosas ‘dietas milagro’ pueden ser peligrosas para la salud de quien las realiza y no solamente por el famoso efecto rebote. Por este motivo, algunos de los cuales más severos detallaremos a continuación, es importante mantener una vida saludable y activa los 365 días del año.
Tres principales problemas de las dietas milagro
Las ‘dietas milagro’ pueden conllevar una pérdida de nutrientes y vitaminas esenciales para el organismo. La deficiencia de minerales puede alterar el gusto y el apetito, favorecer la osteoporosis o los trastornos de la coagulación sanguínea. Por su parte, el déficit vitamínico (especialmente de B1, B2 y B3) puede provocar irritabilidad, lesiones oculares, cutáneas y gastrointestinales.
Pueden producir efectos negativos en la psicología del que lleva a cabo una ‘dieta milagro’ y estos pueden desencadenar trastornos del comportamiento alimentario tales como la anorexia o la bulimia además de desequilibrios en el metabolismo.
Por último, el famoso efecto rebote. Este se produce al haber estado el cuerpo sometido durante mucho tiempo a una dieta a muy bajas calorías con una rápida pérdida de peso, cuando esto finaliza el organismo reacciona haciéndose más eficiente y gastando menos energía, por tanto puede haber serios problemas de salud además de un aumento drástico de peso.
Otros problemas asociados a las ‘dietas milagro’
Pérdida de huesos y dientes. Las dietas que promueven una pérdida de peso masiva y además son restrictivas, pueden propiciar la falta de vitamina D y calcio, empeorando así la salud de nuestros dientes y huesos. De hecho, se ha comprobado el impacto óseo de las dietas que favorecen la pérdida de peso notable.
Riesgo para la piel, el pelo y los ojos. Una dieta milagro muy limitada o estricta puede conducirnos a sequedad en la piel, dermatitis, problemas de visión, caída de cabello o debilidad en el mismo, entre otras manifestaciones propias de la falta de nutrientes.
Incrementan el riesgo cardíaco. Las dietas o productos milagro que no ofrecen una solución definitiva a los problemas de peso, con frecuencia incentivan las subidas y bajadas constante de kilos.
Aumentan el riesgo de sufrir infecciones. Las enfermedades infecciosas como puede ser un simple resfriado o algo más grave, se desarrollan en gran medida dependiendo de nuestro sistema inmunitario, el cual puede verse resentido con dietas milagro o con una pérdida de peso muy marcada y rápida.