Las abuelas siempre tienen su recetario tradicional bajo el brazo, una tortilla de patata, unos callos, unas lentejas.... pero también sobresalen las albóndigas, que siempre es una buena manera de comer algo de carne de forma distinta a la de un filete.
Ahora en Libertad Digital venimos con una receta apta para veganos y vegetarianos y que se puede modificar al gusto. Además es una excelente manera de que mayores y pequeños coman verdura sin realmente saberlo, especialmente aquellos a los que el brócoli como tal se nos atraganta.
Ingredientes (para cuatro personas):
- 180gr de harina de almendras cruda
- 91gr de zanahorias (dos de tamaño medio)
- 30gr de sal rosa (dos cucharadas pequeñas)
- dos huevos
- 500gr de brócoli
- 10gr de pimienta negra
- 6gr de pimentón de la vera (dos cucharaditas)
- 6gr de ajo en polvo (dos cucharaditas)
Preparación:
Lo primero de todo es cocinar al vapor tanto la zanahoria como el brócoli, cuando ya haya enfriado hay que escurrir para que suelte el agua acumulada. Después se chafa y mezcla con el resto de ingredientes, de harina de almendra solamente una cucharada ya que el resto es para el rebozado.
Se hacen tantas bolitas como sea de grande la cantidad de mezcla que nos ha salido y dependiendo del tamaño de albóndigas que se deseen. Una vez formadas las bolitas se pasan por el resto de la harina y se ponen en la bandeja del horno. Una vez dentro se hornean durante 20 minutos.
Como toque final, mientras se están horneando las albóndigas, se puede preparar una salsa de tomate casera para acompañar nuestra comida. Además, si hay algún intolerante a la almendra o simplemente se desea conseguir otra textura, otro tipo de harinas como la de garbanzo o avena quedan también muy bien. También si se desea se puede añadir a la mezcla queso rallado normal para dar un toque diferente.