Para poder ofrecer un producto ibérico del máximo sabor hace falta seguir una serie de reglas. Guijuelo Directo sabe bien cómo alimentar al cerdo ibérico, todo con la prioridad de ofrecer un jamón de primera categoría que satisfaga al paladar y resulte beneficioso para la dieta.
Todos sabemos que el cerdo come de todo. Pero no se le puede dar cualquier cosa. Tampoco hay que alimentarlo exclusivamente de bellotas, porque el animal moriría, tal y como indica Tu Jamón Directo. Durante la fase de montanera o engorde, es necesario dar al animal gran cantidad de hierba además de bellotas. También se alimenta de insectos, leguminosas, gramíneas y otros elementos presentes en la naturaleza.
Es necesario que, además, el animal no sólo coma, sino que también camine y haga ejercico a sus anchas. La tercera condición vital es que el cerdo sea de raza ibérica, naturalmente.
La fase de montanera requiere de su propia técnica. Las bellotas han de ser de calidad, si es que queremos que el jamón ibérico tenga el máximo sabor y propiedades. Se inaugura en el preciso momento en que las especies de quercus (roble, alcornoque y encina) comienzan a dar sus frutos. Lo que dura esta etapa lo determina el periodo de maduración de la bellota, entre septiembre y noviembre.
Todo ello sabiendo que lo primordial es el elemento humano. Un porquero profesional, que sepa controlar la piara y seleccionar personalmente el alimento, es lo que finalmente determina la calidad del producto ibérico. Un proceso en el que nada debe dejarse al azar.