Las galletas son una gran merienda o desayuno de muchas familias españolas, pero qué mejor que hornear las de uno mismo para saber realmente los ingredientes que llevan ¿no? Además, hay tantas variedades que es imposible que uno se canse de cocinarlas. ¿Por qué no preparar unas galletas blanditas rellenas de mermelada de frambuesa y cubiertas de crujiente chocolate?
Por ello, desde Libertad Digital os traemos una receta donde la base de las galletas es la harina de avena, un alimento rico en fibra y proteína pero de sabor insípido. Por ello la juntamos con chocolate y frambuesas y hará las delicias de toda la familia. Son perfectas para llevar a la oficina, como merienda o como capricho para después de cenar. Estas galletas están llenas de sabor y apetecen en cualquier momento. Coge papel y bolígrafo y a disfrutar.
Ingredientes (para nueve galletas):
- un vaso de agua
- una cucharada de harina de almendra cruda
- un cazo de harina de avena integral
- cinco dátiles
- una cucharada de aceite de coco
- dos huevos camperos
- una taza de leche
- una onza de chocolate 85%
- tres puñados de frambuesas
Preparación:
Lo primero que vamos a preparar es la masa de nuestras galletas. Para ello, separamos las yemas de las claras y las montamos con unas varillas eléctricas, después las reservamos en el frigorífico.
A continuación, mezclamos todos los ingredientes de la masa, es decir, la leche, las harinas, los dátiles y los huevos, y después añadimos poco a poco las claras montadas. Una vez tengamos esta masa lista la metemos en una manga pastelera y repartimos, con forma circular, por la bandeja del horno sobre la que habremos puesto papel vegetal. Para que nos queden mejor podemos utilizar un molde circular pequeño.
Lo siguiente es dejar la masa horneando durante 10 minutos a 180ºC con calor tanto arriba como abajo. Después dejaremos enfriar completamente y entonces prepararemos el relleno de frambuesa y el chocolate.
Ahora vamos a por la mermelada de frambuesa para poner sobre nuestras galletas. Simplemente necesitamos agua, aceite de coco y las frambuesas. Debemos ponerlo todo junto en un cazo a fuego medio y dejamos que reduzca, vamos moviendo de vez en cuando. Una vez listo lo dejamos enfriar completamente.
Cuando tenemos la mermelada lista la pondremos sobre las galletas, una cuchadita sobre cada una será más que suficiente. Si nos sobra podemos guardarlo o comerlo con pan, con yogur... lo que se desee. Volvemos a dejar enfriar la galleta.
Ahora ya vamos con el chocolate. Lo que haremos será fundir al baño maría el chocolate y, una vez lo tengamos, añadimos un poco de aceite de coco para que brille y quede más fluido.
La última parte del proceso es cubrir las galletas totalmente con el chocolate y dejar enfriar. Este enfriamiento es quizá el más importante porque es clave para que el chocolate se endurezca mientras lo demás queda blandito. Una explosión en tu boca.