El arroz con sepia es uno de los que más me gustan y lo podemos preparar todo el año, además muy sencillo de hacer y lleva muy pocos ingredientes. Es el plato ideal para una reunión familiar o de amigos.
La sepia, en este caso es fresca. Procurad elegir una sepia o choco tierno y que no muy grande. Aunque podemos utilizar también sepia congelada, con lo que esta receta será más económica. Como en todos los arroces debemos prestar especial atención al caldo que empleemos. Intentaremos aportar el caldo de pescado más sabroso y sustancioso para ayudar en el resultado final del plato.
Este arroz lo he hecho seco, pero podemos hacer un arroz con sepia caldoso y os garantizo que saldrá genial. Eso sí, siempre intentad ponerle caldo de pescado casero si tenéis la oportunidad de hacerlo porque siempre quedará mejor. Por ello, desde Libertad Digital os damos todos los pasos para un arroz con sepia perfecto, no olvides coger papel y bolígrafo para apuntar la receta.
Ingredientes (para dos):
- media cebolla
- un diente de ajo
- una zanahoria
- dos cucharadas de tomate rallado
- un vaso chato de arroz integral
- cuatro vasos chatos de caldo
- una cucharadita de pimentón
- una sepia
- sal
- dos ramas de romero fresco o seco
- aceite
Preparación:
Lo primero que debemos hacer es picar el ajo, la cebolla y la zanahoria en trocitos pequeños. También, en una tabla a parte, cortamos la sepia en trozos pequeños.
El siguiente paso es coger una sartén grande con un chorrito de aceite y poner a sofreír la cebolla, el ajo y la zanahoria. Cuando estén blanditas echamos el tomate rallado y dejamos unos minutos que sofría.
A continuación añadimos el pimentón y dejamos tostar sin que llegue a quemarse. Lo siguiente es echar la sepia y el caldo y dejar que hierva.
En el momento en el que hierva el caldo echamos el arroz y bajamos la potencia del fuego para que se cueza despacio. Hay que tener en cuenta el tipo de arroz que echamos, al echarle integral tardará más que si ponemos arroz blanco. Aquí también añadimos las ramas de romero y corregimos de sal.
Si vemos que se nos consume el caldo y el arroz sigue duro y seco siempre podemos echar un poco más o, incluso, un poco de agua para que no se nos quede duro el arroz. Cuando el arroz esté más blandito y empiece a secarse esperaremos a que se consuma todo el caldo para apagar el fuego.
Una vez lo tenemos apagado debemos dejarlo reposar, sin apartarlo del fuego y tapado con un trapo, durante 5 minutos. Pasado ese tiempo es momento de servir y disfrutar.