"No sé, vamos a verlo. Yo las referencias que tengo no son muy buenas, pero bueno, estaban empezando" fueron las palabras de Kiko Matamoros al llegar al musical Qué no daría yo de Rocío Jurado, interpretado por Anabel Dueñas... Y lo cierto es que a la salida de este, las declaraciones fueron todavía peores.
Como bien sabemos, el colaborador fue al espectáculo en calidad de crítico y no fue solo. Su pareja, Marta López no dudó en acudir con él en su reencuentro con Rocío Carrasco después de que le haya demandado.
"Si a mí me da igual, no me importa que me demanden, allá ellos, ya veremos quién gana en los tribunales. No voy a dejar de venir a disfrutar de una obra porque me hayan demandado los productores" dijo Kiko Matamoros a su llegada al musical. El colaborador es uno de los personajes de la prensa de corazón que más seguridad tiene en sí mismo y que más igual le da lo que opinen los demás de él.
Marta López, como pareja de Kiko Matamoros, no quiso dejarle solo y le acompañó a ver el musical. Una vez allí, habló sobre la posibilidad que su pareja se encuentre con Rocío Carrasco, asegurando que él no tiene miedo: "Es una persona más que viene a ver el espectáculo y sería muy poco inteligente por su parte que no fuera bienvenido".
Lo que más sorprendió es que Kiko y Marta salieron antes de que el musical llegase a su fin. Según la pareja, el espectáculo deja mucho que desear: "La primera impresión que tengo es si Rocío Jurado se merecía esto". Matamoros lo deja bien claro: "Yo creo que ella pone todo de su parte, pero cantar, chillar y bailar es lo que hace ella".