Belén Rodríguez ha desaparecido de la lista de colaboradores habituales de Sálvame, un codiciado puesto al que llegó en 2016 y que le ha valido más de un disgusto por sus peleas con los compañeros y con el público. La salida de Belén se debe a la entrada de Antonio David Flores, que fichó como colaborador de Sálvame días después de su expulsión de Gran Hermano VIP.
Le enemistad de Belén y Antonio David viene de lejos, ya que la periodista es amiga íntima de Rocío Carrasco desde hace años. "Es una persona que nunca me ha gustado", desveló en una ocasión Belén. En más de una ocasión se han visto obligados a compartir plató y sus últimos enfrentamientos han llevado a Belén al límite. Según la revista Lecturas, la colaboradora ya no puede más, la ansiedad ha podido con ella y ha tomado la decisión de dejar el programa.
Pero Belén no solo ha discutido con Antonio David. Su defensa a ultranza de Rociíto la ha enfrentado con sus compañeros de plató. "Aquí no se puede hablar, sois fascistas", le gritó en una ocasión a su amiga María Patiño. El ex guardia civil ya dejó claro que "no vengo a quitar sillas", pero la presión ha podido con Belén y, como ya hicieron sus amigas Terelu Campos y Carmen Borrego, ha abandonado Sálvame.
Su última aparición ante las cámaras de Telecinco fue el pasado fin de semana en la concentración organizada por los fans de Mila Ximénez para pedir el voto y que ésta se haga con el maletín de GH VIP el próximo jueves. ¿Cuál será su próximo destino en televisión? ¿Fichará por Viva la vida como hacen todos los colaboradores que terminan mal con Sálvame? Ella, de momento, guarda silencio.