Algo falla en Operación Triunfo cuando desde fuera se habla más de relaciones sentimentales, polémicas o mariconeces que de música. Los espectadores se han dado cuenta de que esta edición tiene un grave problema con sus concursantes, que parecen estar más preocupados por la imagen que proyectan que por su carrera musical. Les hemos visto hacerse fotos para Instagram, hablar de feminismo, recibir charlas sobre refugiados y bullying e incluso debatir de política, pero lo que no hemos visto todavía son esas ganas de triunfar que solo una plataforma como OT les puede dar.
Quienes también se han dado cuenta han sido los profesores. Fue el caso de Mamen Márquez, profesora de técnica vocal y uno de los pesos pesados del claustro, que durante el pasado fin de semana tuvo que darles un toque de atención a los jóvenes porque no se sabían la melodía de la canción grupal en el momento de entrar al estudio de grabación. "Es desesperante y una falta de respeto (...). No puede ser que bajéis al estudio y no sepáis qué tenéis que cantar en la grupal, que no lo tengáis grabado, que no deis pie con bola", apuntó, y clasificó al grupo como un "desastre total".
Noemí Galera, directora de la academia y responsable de casting, fue todavía más dura con ellos. En la tarde del lunes, Galera reunió a los alumnos para darles una lección. "Cuando se apagan los focos, nadie sabe quién eres. Si no hay pasión y compromiso, nos vamos a la mierda. Nadie os asegura que triunféis", dijo muy sincera. Según la directora, sin trabajo y sin esfuerzo, nadie les verá cuando estén fuera de la academia. "A compañeros vuestros ya no les están viendo", aseguró sobre algunos jóvenes de la edición de 2017 que finalizó en febrero de este año.
El enfado de Noemí, entre otras cosas, viene a raíz de un comentario de Noelia en el que se preguntaba cómo sería cantar la canción grupal en el estadio Santiago Bernabéu, el concierto más grande que dieron los concursantes de OT 2017 ante 80.000 personas. "Nadie os asegura que haya una gira... ¿qué gira? Los del año pasado tuvieron suerte, no sabemos si vamos a llenar un Bernabéu. Ojalá tuvierais una carrera discográfica, pero la realidad no va a ser así".
"Vivid el presente, cuando salgáis y os deis la hostia monumental, recordaréis que teníais un estudio de música y bajabais con desgana. La hostia va a ser guapa, no puedo estar recogiendo los pedazos, pero mi obligación es avisaros. Aprovechad lo que os estamos enseñando, que es conocimiento", sentenció. La charla, lejos de preocupar a los concursantes, les dejó pensativos cinco minutos y acudieron al comedor rápidamente como ya ocurrió con Mamen.