Una de las discusiones más intensas de la gala 7 de este Gran Hermano VIP tuvo como protagonistas a la nominada Miriam Saavedra y Aurah Ruiz, que se acusaron mutuamente de estar más operada que la otra… dando, de paso, excusa para un nuevo arrebato moralista del programa.
"Yo solo me he operado las boobies", bramó Miriam Saavedra en uno de los vídeos dispuestos por la realización para caldear el ambiente del directo. Las dos chicas se habían peleado durante el desayuno y pronto la cuestión acabó derivando hacia el cuerpo de cada una. "Mi nariz es mía, mi culo es mío, mi cintura es mía", gritaba una Aurah absolutamente fuera de control.
"Anda con la mierda revuelta dentro porque no puede hablar, la cara llena de bótox", dijo una hábil Miriam Saavedra, a quien todavía le faltaba sufrir a una tercera invitada a la discusión. A todo esto, Aurah también tuvo que encajar lo suyo: "Me dijo que parecía la muñeca pepona. Se metió a darme", se lamentaba sobre unas palabras del Koala y Miriam.
Makoke defiende a capa y espada a Aurah, en calidad de defensora. Y con ello no hace sino generar más animadversión en el grupo. Tanto que Miriam llegó a confesar: "A veces extraño discutir con Carlos Lozano. Extraño discutir con gente que realmente lo merece".
Aurah tuvo que pedir perdón ante la reprimenda de Jorge Javier. Causa "bochorno" oíros decir esas palabras, dijo el catalán. "Que dos mujeres hagan referencia continua a su físico… Me da igual quién empiece". Es de "cerebros inexistentes" discutir de eso cuando hay mujeres que tienen problemas a la hora de percibir su cuerpo, dijo el Jorge Javier, que fue elevando el tono más y más hasta acabar a voz en grito. Todo ello en un programa que alimentó, de nuevo, la polémica para luego poder apagarla.
"Pido perdón, cuando estoy caliente me salen bichos por la boca. Pero ya habíamos tenido otro encontronazo y es picarme, picarme. No eres mi amiga", dijo Aurah a Miriam, poco convencida, antes de arremeter de nuevo: "También te metiste en su día con el físico de Techi, que se pasó un día sin comer" tras el insulto de Miriam por tener, suponemos, la tripa hinchada.
Mónica Hoyos se metió entonces para reclamar su cuota de atención, y dijo que Miriam la había llamado "vieja" en televisión, provocando la airada reacción de ésta, unos gritos a los que se añadieron los de Aurah, que en realidad nunca se había callado. Miriam elevó la voz de nuevo para defenderse de su enemiga declarada. "Estás blasfemando. Ellas me insultan por mi talla", bramó, acorralada.