Anna Simón celebra esta semana mil programas en Zapeando. Tras el éxito de su paso por El Hormiguero se hizo hueco en el equipo que lidera Frank Blanco en La Sexta junto a Cristina Pedroche, Miki Nadal o Ana Morgade. La periodista se maneja como pez en el agua con el humor y así lo demuestra a diario en directo cada sobremesa.
P: Es la primera vez que celebras 1.000 programas a lo largo de tu trayectoria televisiva.
Anna: Sí, y el balance no puede ser más positivo. Cuando empezó Zapeando nadie daba un duro por el programa. Ha habido una evolución brutal. Se ha sabido ver lo que no funcionaba, se ha cambiado y se ha seguido innovando para que la gente no se aburra y encuentre algo distinto cada día.
P: ¿Te ves celebrando los 2.000?
A: Ojalá, yo lo firmo ahora mismo. Llegar al 1.000 ya es una burrada, llegar al 2.000 sería lo más.
P: ¿Cuál es la clave para conseguir llegar tan lejos?
A: Pues no lo sé. Si supiera la clave para que un programa funcionara, sería rica. A veces te lo curras mucho y luego no funciona. Pero creo que es indispensable que la gente sepa que lo que estamos haciendo es real, a pesar del guión, tenemos la libertad de improvisar. Nos conocemos tanto que con mirarnos ya sabemos lo que estamos pensando y el espectador lo nota.
P: ¿Sois una familia tan bien avenida como parece?
A: Sé que es un tópico y la gente no se lo creerá. Pero nos llevamos bien todos. No solo entre nosotros, sino también con los cámaras, realizadores...
P: ¿Sentías lo mismo en El Hormiguero?
A: Es distinto. Aquí hay mucha más relación porque estamos todos, durante todo el programa. En El Hormiguero yo iba a hacer mi sección y ya.
P: ¿Por qué se acabó tu sección? Se habló de una mala relación con Pablo Motos.
A: Primera noticia, no tengo ni idea de eso. Yo ya no estoy en el programa... No sé. Supongo que en la televisión hay que ir renovando y poniendo caras nuevas.
P: ¿En qué te ha cambiado la vida estos últimos años?
A: Bueno, yo ya vivía en Madrid, así que a nivel personal no ha cambiado nada. Pero me apetecía volver a hacer un directo diario. Es donde mejor me siento, lanzándome al ruedo.
P: ¿Te supone un problema el tema de la fama?
A: No, ninguno. Cuando salgo de trabajar me quito el maquillaje y los tacones y no me conoce nadie. Para mí, la fama no supone ningún problema.
P: ¿Qué te gusta hacer más en televisión?
A: Lo disfruto todo. Quiero hacer tantas cosas, que no hago nada bien. Me gusta bailar, cantar, pero no sé hacerlo. Cada vez tengo menos sentido del ridículo, ahora me da todo igual.
P: ¿Buscaste la televisión o ella te buscó a ti?
A: Me ha buscado. Estudié periodismo y me veía trabajando en un periódico. Pero el único sitio del que me llamaron fue la televisión.
P: ¿De quién es la opinión que más te afecta?
A: Los tuyos son los más críticos y también los que tienen la opinión que más me preocupa. Se agradece mucho la sinceridad de los tuyos.
P: ¿En quién sueles apoyarte?
A: En la familia en general, no tengo un referente concreto. También me apoyo mucho en mis compañeros.