Los cuatro finalistas de MasterChef Celebrity, Saúl, Patricia, Silvia y José, se enfrentaron este martes a dos retos muy complicados con los que intentaron coronarse como ganador de la segunda edición del concurso con famosos.Durante dos meses han reído, han llorado, han trabajado hasta dejarse la piel y han mostrado su evolución en cada plato.
La actriz Patricia Montero entró insegura y tímida, pero gracias a su pasado como deportista tuvo la disciplina y la capacidad de superación para sobrepasar cada obstáculo. Lady Bechamel, como el jurado apodó a Silvia Abril, no pensó llegar tan lejos en el programa después de que una mala bechamel provocara su expulsión. Pero unos días fuera de la competición le dieron a la cómica y actriz las fuerzas para ganar la repesca y encarar la recta final. José Corbacho se ganó el nombre de Pepito Ventajas o José Decepciones, ya que el actor y director ha tenido un camino un tanto irregular, pero echó toda la carne en el asador hasta el último momento. Saúl Craviotto, piragüista olímpico y policía, demostró tener templanza en los fogones y muchas ganas de superarse, tantas que comenzó la noche dispuesto a ir a por el "oro" en esta final.
Para una noche especial, María Marte (dos estrellas Michelin) llevó al plató de Masterchef uno de sus platos, que los aspirantes tuvieron que cocinar siguiendo sus pasos. Quien reprodujese su creación a la perfección conseguiría la codiciada chaquetilla y se convertiría en el primer finalista de la noche. Aunque los cuatro concursantes consiguieron, con mayor o menor éxito, replicar el plato de la chef, finalmente Saúl Craviotto fue quien pasó directo al duelo final."Estoy alucinando. El pasar a la final es una sensación de alivio, de ver que ha merecido la pena todo. Estoy flipando. Esta locura que estamos viviendo es increíble. Llegados a este punto hay que ganar. Si sales a quedarte entre los cinco primeros, te quedas por el camino. Si consigo ganar esa final, va a ser increíble", dijo al enterarse.
En la última prueba exterior, los tres aspirantes restantes cocinaron en El Celler de Can Roca, restaurante que ha sido reconocido en dos ocasiones como el mejor del mundo y que cuenta con tres estrellas Michelin. Los aspirantes sirvieron un menú degustación de seis platos, diseñado por Joan Roca, que degustaron los hermanos Roca, tres miembros más de la familia y dos de sus jefes de partida. Una prueba en la que los concursantes tuvieron que ser muy precisos a la hora de seguir las elaboraciones. La que menos suerte tuvo fue Patricia, que no fue capaz de realizar una de las complicadas técnicas que su postre requería, por lo que no optó a la final del concurso. Finalmente, entre Silvia y Corbacho, la humorista logró pasar a la prueba final y enfrentarse al medallista olímpico: "No me esperaba vestir esta chaquetilla. ¡No me lo puedo creer! Me acuerdo de mi familia, de ver la luz al final del túnel. Estoy en el esprint final".
Los dos finalistas regresaron a las cocinas de MasterChef Celebrity para demostrar todo su talento en el gran duelo. Cocinaron un menú completo de tres platos con el que debían conquistar al jurado y a dos invitados especiales: Martín Berasategui (ocho estrellas Michelin) y Quique Dacosta (tres estrellas Michelin). A pesar de la calidad de los dos menús que ofrecieron, Saúl Craviotto se impuso a la humorista y se convirtió en el vencedor de la edición con platós inspirados en su tierra natal, Lérida.
El ganador recibió el trofeo de MasterChef Celebrity y 75.000 euros para donar a una ONG. Además, los dos finalistas completarán su formación culinaria con un curso de cocina creativa impartido por Basque Culinary Center.
