Aún recuperándose de la sentida pérdida de Anabel Alonso de la semana anterior, este martes las cocinas de MasterChef Celebrity y el jurado prepararon a los aspirantes una noche que difícilmente podrán olvidar. En el primer reto les propusieron hacer un plato libre "digno de un semifinalista del talent de cocina más duro del mundo" y que estuviera inspirado en sus familias. Edurne, finalista de MasterChef 5, regresó para aconsejar en la prueba a los aspirantes de cara a la recta final de la competición.
Además, el reto tuvo una complicación extra, ya que tuvieron que demostrar todo su talento, creatividad y evolución, para conquistar a sus familiares que se sentaron a cenar en el restaurante del plató. Aunque todos supieron reconocer el plato de su pariente, la familia de Edu Soto prefirió elegir el mejor y le dieron la victoria a Silvia Abril.
En la prueba de exteriores, los aspirantes se trasladaron al Real Colegio Universitario María Cristina, una de las sedes de la Universidad Complutense de Madrid. Cada uno de los aspirantes tuvo que cocinar 100 platos de un menú diseñado por Carlos Maldonado (ganador de MasterChef 3), en food trucks. Nathan, Miri, Odhkuu, Jose María y Adrián, exaspirantes de la quinta edición, acudieron para echarles una mano.
El que peor parado salió fue José Corbacho pues el jurado afirmó que no había estado a la altura del prueba: "No habéis hecho caso a nuestras recomendaciones y se ha notado en el resultado final". Edu Soto y Patricia Montero tampoco pudieron librarse de la prueba de eliminación. Carlos, el autor de los platos, tuvo que decidir el primer finalista de la edición entre Silvia Abril y Saúl Craviotto, debido al "empate técnico" que los jueces no quisieron resolver. Finalmente el afortunado fue el deportista: "Estoy viviendo un sueño, esto está siendo súper intenso y hay un sentimiento increíble. Hace dos o tres meses no tenía ni idea de cocinar", confesó.
En la última prueba, de nuevo se enfrentaron a la mítica caja misteriosa con productos grasos como el chorizo, el aguacate, el magret de pato o la nata, con el que tuvieron que elaborar un plato libre al que tenían que añadir un ingrediente que corrigiese esa grasa. El chef Toño Pérez (dos estrellas Michelin), maestro en aunar tradición y vanguardia, explicó a los aspirantes cómo sorprender en esta prueba.
Hubo dos concursantes que supieron corregir ese equilibrio: Silvia Abril que "demostró un gran sentido común para integrar los ingredientes", y José Corbacho, que fue "muy listo por seguir bien las recomendaciones del jurado". En el disparadero de salida quedaron Patricia y Edu que se quedaron "muy lejos de sus compañeros". "Edu, tu emplatado no era bonito y la mezcla de ingredientes no tenía sentido. Te hemos visto muy inseguro desde la primera prueba. (…) Patricia, han fallado tus elaboraciones y el pato, producto principal, te lo has cargado. (…) Hemos tomado la decisión en base a la evolución que habéis tenido. Y el cuarto finalista es Patricia".
En su despedida, un emocionado Edu Soto valoró positivamente su paso por el concurso: "Te quedas con las ganas de mostrar un poquito más. Cuando miro hacia atrás me acuerdo de momentos mágicos. Es una pena no llegar a la final".