Por La Voz pasan decenas de cantantes con las cualidades necesarias para convertirse en uno de los mejores artistas de España. En realidad, sin embargo, una vez terminado el concurso, pocos consiguen tener éxito en el mundo de la música, pero una de las aspirantes ha llegado para cambiarlo todo. Se llama Irene Caruncho y en las últimas audiciones a ciegas fue capaz de ponerle los pelos de punta a los cuatro coaches y encandilar a todo el país. Sólo hicieron falta unos acordes y unos segundos de su voz para que Malú pulsara el botón y girara su asiento y, al momento, hicieron lo mismo Alejandro Sanz y Manuel Carrasco, aunque Melendi tardó un poco más.
Esta gallega de 21 años interpretó Run, un tema de Snow Patrol versionado por la solemne Leona Lewis y muchos ya la comparan con Adele por su imponente voz. A pesar de la insistencia de los cuatro coaches, fue Malú quien más entusiasmada se mostró, insistiendo para que Irene se fuera a su equipo. "Desde el momento en que has abierto la boca, se me han puesto los pelos de todo mi cuerpo de punta. Te ruego, ven a mi equipo, que ganamos La Voz".
Alejandro Sanz lo intentó: "Mi abuelo era gallego", y Melendi trató de conquistarla con su discurso: "Te ruego que me concedas el privilegio de acompañarte a ser una de las artistas más importantes de este país". Lo mismo hizo Manu Carrasco: "¿De qué planeta viniste? Me gustaría orbitar en tu galaxia", dijo provocando la risa del resto del jurado. Sin pensárselo demasiado, Irene eligió a Malú y, aunque aún quedan aspirantes por conocer, su paso por el programa promete dar grandes momentos y se postula a convertirse en La Voz, con mayúsculas, de España.
Irene estudia turismo, pero la música siempre ha estado presente en su vida. "Mi mayor virtud es transmitir cantando", confesó en el programa. Era la segunda vez que intentaba participar en el talent-show de Telecinco, pero en la edición pasada no lo consiguió porque las plazas ya estaban cubiertas. Aunque se presentó con una actitud un poco tímida, lo tiene todo para llegar a lo más alto en la música, siempre que los estereotipos y el estilo de música que se lleva en España se lo permitan.