Y la final de Supervivientes llegó. Todo el mundo apostaba por Mila Ximénez como ganadora de esta edición y si no por Yola Berrocal, pero en ningún momento se barajó el nombre de Jorge. Es más, a día de hoy muchos ni se acordaban cómo se llamaba. Pero sí, ayer recibió de las manos de Christopher Mateo el cheque de 200.000 euros, con el 54% de los votos como ganador de esta edición. Tras ser manteado por sus amigos, solo podía decir que "estaba flipando en estéreo". Normal ya que ni él mismo se creía la victoria.
El primero en ser eliminado fue Suso. Parece ser que al público no le gustó su forma de comportarse dentro de la isla. Después tuvo lugar la última prueba de apnea, en la que el ganador se aseguraba pasar a la siguiente ronda sin ser nominado. En ella los concursantes tenían que aguantar el máximo tiempo posible el aire en varios bidones de agua a distintas temperaturas. Como era de esperar, la prueba dejó los últimos enfados de Ximénez en el concurso porque no soportaba el frío y, después, porque no aguantaba el calor. De nuevo, Jorge se proclamó ganador y una vez más Yola se enfrentó a una nominación contra Mila, en la que la bailarina fue salvada por la audiencia.
Por último, los finalistas entraron en plató. Después de más enfrentamientos de Yola con los concursantes y de que Jorge desvelase que le habría gustado tener un acercamiento con Steisy y con Carla, se cerraron las líneas y Jorge Javier Vázquez anunció entre gritos, y para sorpresa de todos, que el ganador era Jorge.