Alejandro Sanz fue uno de los invitados más sosos de En la tuya o en la mía, el programa que presenta Bertín Osborne en TVE. El cantante fue pacato en sus respuestas, aunque generó interés su tonteo con la mujer del presentador, Fabiola Martínez.
Sobre su familia, Sanz dijo que su madre "fue una mujer muy fuerte, una superviviente" y que su padre "estuvo casi ausente de su familia" por motivos de trabajo, aunque "no se lo he reprochado nunca". Contó que empezó a tocar la guitarra "porque mi madre me quería sacar de casa", aunque él quería apuntarse a karate, "pero ese día estaba cerrado, y al lado había clases de guitarra. Y aquí estoy".
El cantante recordó sus inicios en clubes de alterne y lo que hizo con el primer dinero que ganó: "Le compré un coche a mi padre y a mi madre le puse una peluquería en Moratalaz". Habló de su salto mediático con Mas –disco que incluía "Y si fuera ella" y "Corazón Partío"–. "Con ese disco estuve encerrado en mi habitación un año entero. Me dejaban la comida en la puerta, yo la cogía y seguí trabajando". "No hay ningún otro disco que haya vendido más en España", añadió.
Además, Sanz dijo que admira a Iker Casillas y a Paco de Lucía, "un genio a la altura de Beethoven y Mozart".
Sin embargo, el momento más interesante fue paralelo a la entrevista. Apareció Fabiola, la mujer de Bertín, y este se enteró de que trabajó en el videoclip de Sanz de "Y si fuera ella". Ella dejó claro que repetiría con el cantante y preguntó si hacía todo tan bien "como canta y cocina". El presentador se puso algo mosca y se quejó de que nadie le hacía caso.
"Yo quiero jugar al futbolín", dijo Fabiola. "¿Y con quién vas?", le preguntó Alejandro: "Si tú me dices ven, lo dejo todo", le contestó ella. Al final, Fabiola escogió a su marido porque "no has visto la cara que ha puesto", bromearon.