Democracia participativa de Carmena: ¡sí se puede!

Monsieur de Sans-Foy y Fray Josepho se suman de forma entusiasta a los métodos de democracia participativa que ha puesto en marcha el Ayuntamiento de Madrid a través de la web decide.madrid.es. El pueblo debe hablar. Y hay que hacer propuestas imaginativas y progresistas que transformen la vida de los ciudadanos. ¿Qué propuestas? Lean, lean.

LA WEB DE LOS DESEOS
por Monsieur de Sans-Foy

La abuela de la web, la bruja buena,
la añeja y progresísima Carmena,
recoge nuestros íntimos deseos:
Le piden que termine con los toros,
le piden que se instalen inodoros...
pues dicen que, en la Corte, huele a meos.

Los súbditos del Oso y el Madroño,
de deudas y marrones hasta el co...
ya tienen quien atienda sus plegarias.
El fraile y el autor de estos renglones
tenemos nuestras propias peticiones,
humildes, pero revolucionarias:

Mi máximo deseo, ¿cuál sería?
¡Luchar contra la insana tiranía
que lleva la apretura hasta las llagas!
¡Abajo con las prendas interiores!
¡Abajo los gayumbos opresores!
¡Abajo con los tangas y las bragas!

¡Carmena, dilo tú, que te hacen caso!
¡Las bragas, ni de seda ni raso!
¡Libremos a la piel de ese cilicio!
¿No somos ciudadanos responsables?
(En caso de accidentes lamentables,
responda cada cual de su orificio).

CARMENA NOS RECONCILIA
por Fray Josepho

No siempre discrepamos. ¡Mesié, mi enhorabuena!
Llevamos una racha que, gracias a Carmena,
transforma en carantoñas nuestra cruenta lid.
Secundo su propuesta, como si fuera mía,
y espero que se vote por amplia mayoría:
hay que prohibir gayumbos y bragas en Madrid.

Que hable el pueblo llano. Que voten los vecinos.
Mesié, con su propuesta, no habrá más palominos,
lo cual es un progreso sin duda colosal.
Pero si me permite, le añadiré una enmienda:
que a cada ciudadano, y a cambio de su prenda,
se le procure un ticket de comedor social.

Con esto mataremos dos pájaros de un tiro:
les damos a las partes pudendas un respiro,
y a la terrible hambruna ponemos solución.
¡Me encantan estas fórmulas de hacer nueva política!
¡Se puede! ¡Sí se puede! ¡La casta monolítica
ya tiembla ante el avance de la revolución!