Las literas son uno de esos muebles que creo enfrentan a padres y niños. A los padres pueden parecerle un verdadero peligro, pero casi todos los pequeños desearían alguna vez dormir en una de ellas. En realidad, poco a poco los adultos han aprendido a cogerle cariño, e incluso se plantean que pueden ser la opción ideal al tener en cuenta que apenas ocupan espacio. Pero el mundo de la decoración sí parece haber hecho caso a los más pequeños y ha convertido a las literas en un objeto de culto, mucho más allá de sus diseños funcionales.
Vemos literas incluso donde por normas de espacio no se necesitarían. Vemos incluso literas que osan desafiar las leyes de la gravedad apostando por materiales flexibles que dan la impresión de crear un ambiente lúdico. Pero si las llevamos al terreno de los hogares un poco más comunes, no tanto de revista de decoración o decorado de película, la tendencia de las literas puede ofrecerte crear dormitorios con mucha personalidad y prácticos. A continuación te presentamos algunos escenarios en los que sacarle el máximo partido.
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Las literas pueden ayudarte a convertir un espacio pequeño en un espacio funcional, moderno y con gracia
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Las literas son también grandes aliados a la hora de hacer habitaciones de invitados en cualquier rincón del hogar. ¿Pensabas que ese diminuto estudio no podía ser el espacio donde durmieran dos personas? Si pruebas con las literas verás que todo es posible.
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Una litera es al mismo tiempo un mueble de diseño. De hecho, las hay de tantas formas, colores y tipos de escaleras que hojeando catálogos puedes llevarte una buena sorpresa al respecto. La vedad es que resultan no solo funcionales, sino verdaderos muebles con personalidad.
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Las literas son divertidas y, con el auge de los muebles puf y de descanso en este estilo, se convierten en un mobiliario ideal para las estancias de los más pequeños o de aquellos que quieren que su casa sea un verdadero cuento.
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Las literas no son solo perfectas en casa. Pueden resultar muy útiles decorando espacios pensados para el trabajo, pero que pueden transformarse en lugares de descanso cuando las horas que se pasan en el ordenador se hacen eternas.
Hay unas cuantas razones para poner literas en tu vida, y en este caso, los niños llevan razón. Solo una última cosa, la gente que duerme en la litera de arriba, no se cae. Aunque de primeras no te lo creas.