En Mitad y mitad, que está llenando en todas sus funciones el Teatro de la Latina, Nieto comparte escenario con Fernando Tejero. El actor ha hablado de la exitosa obra, la comedia que interpreta actualmente, y ha explicado que "cansa más hacer comedia que drama, salgo de hacer esta función exhausto". Pero para el actor "es muy reconfortarte porque se nota el calor del público de forma inmediata". En el drama, sin embargo, "lo mejor que te puede pasar es que estén todo callados", afirmaba. Aunque, esta obra contiene tanto comedia como drama, porque según ha dicho el actor "toda comedia parte de un drama". En este caso, el personaje que interpreta Pepón Nieto está sufriendo desde que empieza la función. El personaje lleva mucho tiempo cuidando a su madre, que está enferma, y su vida se limita a ir del trabajo a casa. Su único sueño es poder irse a Lanzarote, pero no puede mientras su madre siga viviendo. Además, como problema añadido, aparece su hermano, interpretado por Fernando Tejero, que nunca ha cuidado de su madre y que va a intentar engañarle.
La obra está escrita por Pepe Antón Gómez y Jordi Sánchez, actor que interpreta a Antonio Recio en La que se avecina. "Trabajan muy bien la comedia", afirmaba Nieto, "yo ya había trabajado con ellos". Los autores tenían la función escrita desde hacía 10 años, y "la tenían guardada en un cajón". Cuando Pepón Nieto se puso a leer texto vio el potencial que podría tener la obra. Aun así, no fue hasta ponerla frente al público cuando se dio cuenta de lo bien que funcionaba. "Al leerla me pareció que no trataba temas importantes, luego al interpretarlo me doy cuenta de que sí, que trata temas como lo ruin que puede llegar a ser el ser humano, como uno mete las uñas y araña si ve que el fango le llega al cuello", explicaba. Según el actor hay en esto mucha actualidad, ya que es la situación que está viviendo España.
Lo que más gustó a Nieto fueron los personajes, "son dos personajes muy antagónicos pero muy bien construidos y muy complementarios y muy reconocibles, cualquier espectador se puede sentir identificado con cualquiera de los dos". Según explicaba en la entrevista, en la obra existe un paralelismo con el payaso listo y el payaso tonto, "pero luego ni el listo es tan listo ni el tonto tan tonto".
También ha hablado de su trabajo en televisión, "la tele está muy bien, nos da popularidad y nos da fama", explica, "pero la popularidad de la única manera que me interesa es para canalizarla y poder llevar gente al teatro". Para Nieto, que no concibe vivir sin teatro, invertir en él es una obligación. Admite que tiene muchos compañeros de profesión a los que les parece negativo hacer televisión, pero el actor admite haber aprendido mucho en series como Periodistas o Los hombres de Paco.
A pesar de sus tablas, sigue poniéndose nervioso cada vez que pisa el escenario. "Me ataco cada vez más", decía. Y contaba que siempre tuvo la sensación de que a su padre no le interesaba su trabajo, hasta que un día le llevó al teatro dos horas antes de una función y le subió al escenario. Su padre, al ver el patio de butacas vacío, le dijo: "¿no te da miedo?". "Desde entonces le cambio el chip de lo que es este trabajo", explicaba Pepón Nieto.
Pero sobre todo, el actor está contento por la acogida que está teniendo la obra entre el público. Contaba en la entrevista con Arconada que alguna vez había comentado con Tejero: "si esto no funciona no vamos a levantar cabeza, estamos metiendo aquí nuestro dinero". Pero para Nieto lo importante es que ha cumplido su objetivo: "Cuando llegué a Madrid tenía el sueño de llenar como Lina Morgan".
