El líder estudiantil Gabriel Boric, de 35 años, se convertirá en marzo en el presidente más joven de la historia de Chile. El representante de los comunistas de Chile se hizo con la victoria por un 55,8% de los votos, una amplia victoria frente al candidato de la derecha José Antonio Kast.
Mientras Chile se prepara para afrontar el aumento del control del Estado en educación, pensiones o salud que prepara Gabriel Boric apoyándose en un aumento de cotizaciones e impuestos, salen a la luz declaraciones del futuro presidente, vinculado sentimentalmente a la antropóloga Irina Karamanos.
A Irina Karamanos, antropóloga de 32 años, ya la han apodado "la Irene Montero chilena" porque lidera el Frente Feminista dentro del partido. Como en el caso de la española y Pablo Iglesias, ya ejerce de asesora del futuro presidente (es militante y delegada metropolitana de Convergencia Social) y, también como Montero, ella misma ha manifestado su intención de "repensar" el papel de primera dama en beneficio de la política feminista. "Han cambiado muchísimo las cosas y creo que así también hay que repensar el poder y las relaciones", dijo al respecto.
De antepasados griegos, Karamanos comenzó una relación con Boric hace tres años pero solo fue hace unos meses cuando su relación salió a la luz.
En una entrevista en radio, Boric confirmó que había una "compañera a quien adoro", pero que se mantenía "soltero". Con gran locuacidad, Boric definió su relación como "una fauna propia imaginaria donde nos transformamos en manatíes, focas, en pájaros para volar juntos y lograrnos imaginar un futuro juntos".
Pero en Chile hay muchos que señalan que Karamanos, con su repentina aparición pública, es un intento del candidato Boric para parecer más presidenciable, como así ha sucedido finalmente.
En otra entrevista en medios de comunicación reciente que se ha difundido por redes sociales, Boric confiesa abiertamente haber tenido relaciones con hombres en el pasado. Preguntado por un apodo despectivo de juventud, "Gaybriel", el candidato lo confirmó y confesó relaciones con un compañero.
"Era uno de tantos sobrenombres, Gaybriel, por exploraciones de la sexualidad", dijo con sinceridad", citando a un "amigo, un compañero" que formó parte de "una exploración adolescente que ojalá no sea un tabú y todos tengan la oportunidad de hacerlo".
"Cualquier exploración fuera de los cánones de lo normal era profundamente condenada, tenia un amigo, un gran compañero con el que exploramos y claramente eso era muy mal visto", dijo Boric en la citada entrevista.
Los medios chilenos, mientras tanto, describen a Irina como una persona muy reservada que se dejó encantar por Boric con el tiempo. De una entrevista en el programa Las caras de la moneda, de Canal 13, se sabe de ambos que él le llama "chofa" y ella le llama "chofo", porque a ambos les gustan las alcachofas.
De momento, en Chile nadie sabe cuál será el papel real de Karamanos, si ocupará un rol destacado en la política o si, tras ser elegido Boric, volverá al anonimato, desaparecerá fiel a esa supuesta discreción. Tal vez la clave esté en lo que se publica en el diario Clarín, que escribe -literal- que "el rol de primera dama tal vez mute en otro cargo que termine en manos de alguien que no tenga ningún vínculo personal con el jefe de Estado".