La decisión de Raquel Sánchez Silva tras las últimas insinuaciones de sus exsuegros

Ocho años después del fallecimiento de Mario Biondo, sus padres Giuseppe Biondo y Santina D'Alessandro han reaparecido en nuestro país con una polémica entrevista en Sábado Deluxe en la que han vuelto a poner en el ojo del huracán mediático a la que fue su nuera, Raquel Sánchez Silva. Los italianos se niegan a creer que su hijo se suicidase, tal y como determinó la justicia española, así como las dos autopsias realizadas tanto en nuestro país como en Italia.

Y es que según los padres del cámara, Mario fue asesinado porque "descubrió algo muy gordo" y, aunque no acusan directamente a la presentadora, están convencidos de que "oculta algo": "No quiere que se sepa la verdad", mantienen, asegurando que creen que Raquel habría sido infiel a su hijo y que éste lo habría descubierto.

Sin ningún tipo de relación con la extremeña desde que su hijo falleció, Santina y Giuseppe no entienden que la presentadora "mintiese" en el juicio ni el motivo por el que no ha intentado llegar hasta el fondo del asunto para descubrir "la verdadera causa de la muerte" del cámara, ya que según ellos, "Mario nunca se hubiese suicidado".

Unas declaraciones que han afectado profundamente a Raquel, que ya demandó a los que fueron sus suegros por acoso en redes sociales hace años y que, según apuntan diversas fuentes, podría volver a tomar medidas legales debido a estos últimos ataques.

En las últimas horas se ha podido ver a Raquel intentando pasar desapercibida, pero continuando con su día a día. Preocupada, cabizbaja y con la mirada triste, la comunicadora llegó a su casa en el centro de Madrid con un patinete eléctrico sin hacer declaraciones sobre las afirmaciones de sus exsuegros.

Con atuendo deportivo, la extremeña lució botas naranjas, pantalón negro, mochila en el mismo color y un llamativo plumífero con diferentes estampados de colores, con print de cebra, flores amarillas y detalles lilas. Una manera de poner color a su vida en un momento muy delicado en el que, ocho años después de la muerte de Mario, revive su peor pesadilla.