Ainhoa Arteta y Matías Urrea han decidido separarse dos años después de celebrar su flamante boda en Cádiz, tal y como adelanta Semana este miércoles en sus páginas. La pareja ha pasado por algunos baches en los últimos meses que les llevó a distanciarse. De hecho, según desvela la revista, su relación no es buena desde hace un tiempo. El divorcio es definitivo y la soprano tiene pensado darle un giro a su vida trasladándose a Bilbao.
La idea del todavía matrimonio es solucionar los trámites pertinentes para firmar el divorcio y emitir un comunicado para dar a conocer la decisión. Mientras llega ese momento, Ainhoa y Matías esperan poder mantener este delicado momento con total discreción para evitar las especulaciones. Se trata del cuarto divorcio de la aclamada artista.
El último año ha sido especialmente duro para Ainhoa Arteta, ya que a sus problemas personales se suman los de salud. Tras superar el coronavirus, sufrió sus dolorosas secuelas y tuvo que utilizar una silla de ruedas para desplazarse.
La covid-19 le produjo un edema y se le inflamaron las venas dentro de la rótula de los huesos, por lo que su movilidad se vio reducida. En agosto tuvo que volver a ingresar en el hospital, donde pasó el mes entero. "Hoy me han dado de alta. Solo puedo decir gracias, gracias y más gracias por salvarme la vida y por todo, desde el trato a la profesionalidad", escribió por sorpresa cuando recibió el alta.