De una manera o de otra, Kiko Rivera e Irene Rosales siempre encuentran la manera de estar en el candelero. Con la pareja de vacaciones después de la oleada de escándalos del DJ con su madre y la renuncia de ella al programa Viva la vida, se limitan a descansar en Matalascañas, Huelva.
Y allí, en el hotel donde se alojaron, Kiko Rivera e Irene Rosales dejaron algunas tórridas imágenes de amor veraniego. Besándose y abrazándose apasionadamente, la pareja aclara sesos rumores de ruptura que los han perseguido durante los últimos meses.
"Abrázame fuerte"; "Siempre juntos"; declaran y se contestan entre ellos en Instagram. Kiko y su pareja ponen fin a una temporada repleta de altibajos desde que, en medio de las infidelidades de él sacó a colación el escándalo de Cantora de La herencia envenenada.
La relación de Kiko con su madre, Isabel Pantoja, parece rota para siempre. Por delante queda todavía la resolución judicial de todos los asuntos relacionados con el legado de Paquirri, que han roto en pedazos la familia.
Nada de esto parece importar mucho a Kiko, que se dora al sol junto a su pareja mientras preparan ambos nuevos proyectos. En el caso de Irene Rosales, una más que posible participación en un futuro reality de Mediaset, razón por la cual podría haber dicho adiós a Viva la vida antes de las vacaciones.