Antonio Carmona tenía, como se suele decir, mono por volver a pisar un escenario después de un año y medio de parón por el dichoso coronavirus. No lo ha hecho solo, ahora le acompaña en su gira su hija Marina, que es la ultima estrella de esta saga de artistas, y lo cierto es que están cosechando un éxito tremendo.
"Poder salir a un escenario y tener el calor del público para mí es lo máximo y lo que necesitaba después de tantos meses", ha dicho. El granadino acaba de comenzar una gira que durará hasta el mes de octubre. "La pasada semana actuamos en Los Baños Árabes, en Jaén, con 9 músicos en el escenario. Fue muy emocionante por la ilusión que teníamos después de tanto tiempo de espera. He tenido demasiado tiempo en el estudio, pero el contacto con el público es fundamental". Así lo explicó.
Por su parte, Marina acaba de regresar de México, donde ha conocido a unos músicos y productores magníficos. "He tenido la suerte de colaborar con C. Tangana en los premios MTV junto a mi hermana Lucía, y hace un mes Vanesa Martín me invitó a cantar en el WiZink Center de Madrid e hicimos una fusión super bonita del tema de Manzanita, "La quiero a morir. He tenido la suerte de haber actuado en el Teatro Colon de Buenos Aires, y en el Real de Madrid, pero cantar en el WiZink era mi sueño. Ahora estoy centrada en mi nuevo trabajo, que verá la luz el próximo septiembre. Estoy fusionando la "chanson française". Cuando decidí a estudiar música a Miami y me subí a un escenario, me di cuenta enseguida, que a lo que quería dedicarme es a esto. Lo tengo muy claro". De esa manera tan clara lo contó.
Padre e hija han hecho un pequeño alto en su trabajo porque han sido nombrados embajadores del Citroën C5 Aircross Hybrid. "Nos sentimos super cómodos, es un coche muy fácil de llevar, además nosotros llevamos siempre muchos instrumentos y tiene un maletero enorme. Estamos encantados".