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Rocío Carrasco exhibe la agresión de su hija adolescente: "Tenía miedo de vivir con ella, me daba pánico"

La hija de Rocío Jurado aseguró que no está preparada para coger el teléfono a su hija.

Rocío Carrasco | Telecinco.es

Rocío Carrasco se enfrentó este miércoles a una de las noches más complicadas de su vida. La hija de Rocío Jurado decidió sentarse en el plató de Rocío: contar la verdad para seguir viva, para aclarar algunos aspectos que no han quedado claros de los primeros siete capítulos de la serie documental donde narra el supuesto infierno que le hizo pasar Antonio David Flores.

La entrevistada hizo aparición en el plató de Telecinco, mientras el cantante Blas Cantó versionaba la canción Como alas al viento, de su madre, visiblemente emocionada y muy nerviosa: "Tengo muchos nervios y muchas ganas de llorar pero al igual pensaba que era necesario y que tengo la fuerza y la valentía como para hacerlo. Hay cosas que puedo demostrar con documentación y otras cosas como las vivencias o los sentimientos, que no puedo demostrarlos. Pero solo quería que se me escuchara", dijo antes de comenzar su relato.

Uno de los temas principales de la noche fue el de la agresión que sufrió por parte de su hija el 27 de julio de 2012, cuando Rocío Flores contaba 15 años. Una discusión entre madre e hija derivó en un episodio violento que termina con Rocío Carrasco en el hospital y por el que su hija fue condenada: "Ese día Rocío me agrede y yo termino en un hospital. Es algo que se ha sabido públicamente (...) Mi hija para de pegarme en el momento en el que caigo al suelo y pierdo la conciencia. Ella se asusta y se va. Tenía miedo de vivir con ella, tenía pánico. Hay detalles de ese relato que no se van a emitir porque van a quedar entre ella y yo, porque la realidad es mucho más dura de lo que cuento", dijo sobre lo que se verá en el octavo episodio que se emitirá la próxima semana.

A pesar de exponer la condena en directo, Rocío pidió a los colaboradores que atacan a su hija en ese sentido "por lo que ella realizó" que dejen de hacerlo: "Rocío llega a ser verdugo porque antes ha sido víctima, y ha sido más vulnerable que yo. Y quiero antes, de antemano, pedir públicamente a las personas que la atacan, por lo que ella realizó, que no la ataquen, ella no tiene la culpa. La culpa es de otra persona, que es el responsable de que ella actuase de esa forma".

La hija de Rocío Jurado nunca denunció a su hija: "Primero porque a esa la he parido yo y es una víctima y, segundo, porque nunca podría denunciarla porque es lo más maravilloso que me ha pasado en la vida. Para mí la maternidad ha sido lo más maravilloso que me ha pasado en la vida. Siempre la he querido proteger. El que me pegaba la paliza en ese momento era su padre, no la niña".

No obstante, aseguró que se vio obligada a declarar ante un juez: "Tuve que relatarlo ante un juez porque no tuve más remedio. Cuando me dicen que declare en la Guardia Civil yo digo que no quiero declarar en contra de mi hija porque tendría que contar la realidad. Tenía una traumatismo en la cabeza y en ningún momento se preocupó por mi estado (...) Ella sí me denuncia a mí, junto a su padre, por maltrato habitual. A mí mi hija me pega, se monta en un coche para ir a un cursillo de verano y, según se sube, saca un móvil descuelga el teléfono y habla con su padre y le dice: 'Papá, ya está hecho'".

Según la entrevistada, intentó "por todos los medios" que esta información no saliese a luz y que, una vez que fue publicada por Vanitatis, "levantó teléfonos" para evitar que se hablase de ello en los platós de televisión: "Pedí que no se hicieran eco y que lo sacaran. Siempre he intentado protegerla, a ella y a su hermano. No me hace bien verla en televisión, el ver que la niña que era no existe ya".

"No estoy preparada para coger el teléfono a mi hija"

Ante las preguntas de Jorge Javier Vázquez y Carlota Corredera de si cree que el vínculo con su hija está roto "para siempre", Rocío confesó que es algo no puede romperse "por mucho que lo hayan intentado": "Ese vínculo ahora está enterrado, solapado o está invisible en este momento. Pero el vínculo sigue y no me lo va a quitar nadie porque a esa la he parido yo".

Rocío Carrasco intentó justificar el que no haya cogido el teléfono a su hija durante la última semana, tal y como la joven confesó durante una intervención en El programa de Ana Rosa: "No me siento preparada para cogerle el teléfono. Me llamó el día antes de Ana Rosa y al día siguiente también. Tres veces esta semana y el 3 de diciembre. Nunca le he dicho a mi hija: 'Aquí no vuelvas a llamar, yo no soy tu madre'. Jamás en la vida le he dicho yo a mi hija eso. Jamás. Sé que las condiciones no son las idóneas para hablar con ella. Tiene que pasar tiempo y que yo esté preparada. Esto no es un capricho mío, sigo las directrices de unas personas que me dicen que no haga eso (...) Cuando veo su llamada siento inseguridad, miedo y es todo lo que no quiero volver a sentir. Algo de lo que me ha costado mucho librarme".

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