Día triste para la familia real británica que este sábado despiden al duque de Edimburgo en un acto exclusivamente privado y familiar, como era su deseo. El príncipe Guillermo y su mujer Kate Middleton llegaban al castillo de Windsor pasadas las 2 de la tarde para dar el último adiós al consorte de la reina Isabel II.
De riguroso luto y manteniendo un perfil bajo, la mujer del príncipe Guillermo ha querido tener un detalle con la Reina en un día tan complicado para ella luciendo una gargantilla que pertenece al joyero real y que tiene un gran valor sentimental para la monarca. Se trata de una gargantilla de perlas con un gran broche de diamantes, una joya de valor incalculable que la reina Isabel mandó confeccionar en 1980 y que también lució Lady Di.
Esta no es la primera vez que Kate Middleton se deja ver con la citada joya, fue en 2007 cuando la duquesa de Cambridge la llevó por primera vez para la cena de celebración de las bodas de platino de Isabel II y Felipe de Edimburgo.
Kate Middleton también ha lucido un diseño de escote asimétrico y largo midi con un enorme lazo que dejaba al descubierto la joya, que se ha llevado todo el protagonismo. Tampoco han pasado desapercibido los dos pendientes de perlas a juego con los que ha completado su look. Se tratan de un par de perlas de Collingwood que regalaron a Lady Di el día de su boda con Carlos de Inglaterra y que heredó Kate tras su boda con el príncipe Guillermo.
