El actor vasco Unax Ugalde se ha ganado una excelente reputación como actor desde sus inicios profesionales en 1998. Aunque su filmografía es notable, ha sido en la televisión donde ha forjado su popularidad. En la actualidad interpreta el papel del padre Gorka en la serie de la sobremesa en Antena 3 Amar es para siempre. En su vida privada está felizmente casado con la periodista Neus Cerdá y son padres de dos hijos, el último nacido en enero.
Unax Ugalde es natural de Vitoria, donde nació hace cuarenta y dos años. De familia modesta, hijo de un obrero de los Altos Hornos no había pensado ser actor pero junto a unos compañeros, todos repetidores de COU, se proponían marcharse una temporada a Londres, con la peregrina idea de aprender el idioma y estudiar Arte Dramático. A Unax la aventura le apetecía, pero a su padre, no. En todo caso, que lo intentara en Bilbao. Pero sin que renunciara a la carrera de Ciencias del Mar, que también le ilusionaba, en las islas Canarias. El caso es que, finalmente, para financiarse esos cursos de interpretación encontró el modo de ganarse entonces unas pesetas: en un supermercado disfrazado de bola de chocolate. Se estableció en Madrid, formó parte del reparto de la serie A las 11 en casa, con Ana Obregón, y ya no paró de trabajar. De aquel debut televisivo recuerda que le temblaban las piernas, y que Ana se dio cuenta, lo llevó a un rincón del estudio para tranquilizarlo y darle ánimos. Tenía Unax sólo diecisiete años, lo que explica que siendo un novato precisara de alguien tan veterana como era la hoy infortunada actriz, que no acaba de superar la muerte de su hijo.
En amores no le faltaron oportunidades. Con Ingrid Rubio estuvo enrollado un tiempo. Mas fue en 2018 cuando la periodista Neus Cerdá acabó con las aventuras sentimentales del actor vasco. Año en el que contrajeron matrimonio. Nació su primer hijo, Odiel y hace algo más de dos meses, Max.
En la actualidad, Unax Ugalde puede sentirse afortunado porque aparece en dos series. Una es ·La valla, al lado de Ángela Molina, y la otra, ya mencionada Amar es para siempre, donde incorpora a un sacerdote progresista, que antes de abrazar los hábitos tuvo una relación amorosa con el personaje que interpreta Manuela Velasco.
La filmación de Amar es para siempre lo retiene en los estudios desde las ocho de la mañana hasta las cuatro de la tarde. Eso significa que ha de madrugar. Pero es que, cada jornada que termina, ha de prorrogarla en casa estudiando un montón de folios que ha de llevar aprendidos al día siguiente. Aun así, tiene suficiente tiempo para compartir sus horas familiares con la mujer que quiere y los dos hijos que adora: "Ser padre me ha cambiado la vida", termina diciendo, quitándose la casulla tras cantar Misa en la ficción de su personaje en la serie. Cuando dice "padre", por supuesto se refiere a su vida privada.