El programa Sálvame ha emitido los primeros minutos del primer capítulo del documental sobre Rocío Carrasco para cebar el estreno del domingo, y a tenor de lo mostrado, va a crear mucha polémica.
Kiko Matamoros y Kiko Hernández dejaron caer su razón para hablar: "Hace un año nos enteramos que su hija Rocío Flores estaba absolutamente preocupada porque le había llegado una información de su madre y había intentado ponerse en contacto con ella".
Se referían, en efecto, a un intento fallido de suicidio en el que -dijo Jorge Javier- Rocío "no pudo soportar más la presión mediática y el maltrato de su exmarido y, tras años de pensamientos persistentes de querer matarse, decide hacerlo". "Días después, mientras permanece ingresada en el hospital, Rocío Carrasco Mohedano, hija de la cantante Rocío Jurado y el boxeador Pedro Carrasco, toma la decisión de hablar para seguir viviendo. Y su historia hiela la sangre", explicó el presentador.
"Lo que voy a contar no es fácil, creo que ya es demasiado tiempo escuchando mentiras y quiero que se sepa la verdad". Mirando a cámara, Rocío Carrasco asegura en el programa que no es la persona que se ha retratado en televisión durante estos 25 años: "Yo no soy eso, no soy esa persona", tachando a Antonio David de "un ser que lo que ha hecho durante mucho tiempo ha sido intentar destrozarme y acabar conmigo pública y personalmente".
Más declaraciones de Rocío Carrasco: "No me siento maltratada, me siento muy maltratada; he tenido miedo a vivir la vida que me estaban haciendo vivir, he tenido pánico a levantarme por la mañana porque no sabía que me iba a pasar durante el día, a eso le he tenido terror, porque sabes que algo te iba a pasar, pero no sabes el qué" y ha confesado por qué ha estado callada todo este tiempo: "Por dos motivos, por terror y por la cara de esos dos hijos que son mis hijos".
También le preguntan a la hija de Rocío Jurado si recuerda el último día que vio a su hija y contesta: "Sí, el 27 de julio del 2012, el peor día de mi vida", y también recuerda el último día que vio a su hijo: "Un 23 de junio del 2016. "Son dos fechas que no se me olvidan nunca, le dije que disfrutara mucho de su verano y que en septiembre ya tenía la boda de su madre, que era lo que él quería, pero ese día no llegó, no dejaron que llegara".
En el cuarto vídeo se oye a Rocío hablar sobre el problema con su hijo y además, asegurar que lo más importante para ella siguen siendo sus hijos: "Habrá quien me entienda y quiera hacer como que no me entiende y habrá quien no me entienda realmente, yo solamente puedo demostrar la verdad. Dentro de toda esta historia hay unos puntos muy específicos con los que se entiende perfectamente toda la situación del niño. Si algo me he considerado en la vida es buena madre' porque yo me he puesto por encima de mis hijos siempre y yo he estado malviviendo durante 20 años con tal de yo no contribuir al sufrimiento de dos niños. A mí me ha arrancado de cuajo lo más importante que, bajo mi punto de vista, tiene una mujer".