La casa real británica se mostró "entristecida" tras conocer el sufrimiento de los duques de Sussex, Harry y Meghan, y reconoció que los problemas que expusieron en su entrevista en la televisión estadounidense con Oprah Winfrey son "preocupantes, especialmente el del racismo".
"Los asuntos planteados, especialmente el de la raza, son preocupantes. Aunque algunos recuerdos pueden variar, (estos problemas) son tomados muy en serio y serán tratados por la familia en privado", señala un comunicado difundido por el Palacio de Buckingham este martes. "Harry, Meghan y Archie siempre serán muy queridos por los miembros de la familia", finaliza la escueta misiva de apenas unas líneas.
La entrevista en la CBS ha desatado una oleada de indignación en el Reino Unido, sobre todo cuando Markle declaró que "hubo preocupaciones y conversaciones sobre lo oscura que podría ser la piel" de su primogénito cuando naciera.
"Meghan y Enrique: a la caza para identificar al miembro de la familia real que hizo un comentario racista sobre Archie", "Exigimos saber quién es el racista" o "¿Quién en la familia real cuestionó el color de la piel de su futuro hijo"... Estos son algunos de los titulares que los periódicos británicos dedican a la crisis.
El diario The Times reveló que la reina Isabel II se negó el lunes a firmar un comunicado que los funcionarios del palacio de Buckingham habían preparado y pidió más tiempo para evaluar el escándalo antes de responder al contenido de la entrevista. Al parecer, Isabel II, el príncipe Carlos (heredero al trono) y el príncipe Guillermo mantuvieron el lunes una reunión de "crisis" para evaluar la posible respuesta, según los medios.
Además del comunicado, el príncipe Carlos, acompañado de su mujer Camilla, visitó el martes una nueva clínica de vacunación contra el coronavirus. Allí recorrieron las instalaciones y charlaron con los británicos que iban a recibir su dosis, así como con los sanitarios a quienes han felicitado por su labor en plena pandemia. Clarence House distribuyó una serie de fotos en las que se ve al príncipe de Gales rodeado de personas negras, en un intento de tirar por tierra las acusaciones de racismo que pesan sobre los Windsor.
The Prince of Wales today visited @jesushouseuk in London, where a new NHS vaccine pop-up clinic has been put into action.
Led by Pastor Agu Irukwu, the church has been working hard to support the local community during the coronavirus pandemic and combat vaccine hesitancy. pic.twitter.com/4DzHm8NJdV
— The Prince of Wales and The Duchess of Cornwall (@ClarenceHouse) March 9, 2021