Tras unos días convulsos en los que Anabel Pantoja ha sido el centro de todas las polémicas, ya sea por sus joyas, por los conflictos familiares, por sus problemas con el equipo de Sálvame o por los enfrentamientos con sus compañeros de plató, la sobrina de Isabel Pantoja anunció este jueves que ha tomado una decisión. Para informar sobre ella, escribió una carta que pidió leer a los espectadores.
Sin embargo, cuando apenas llevaba leídas tres palabras, el director David Valldeperas entró en plató para quitarle el texto de las manos y le pidió unos días para reflexionar su decisión. "Me gustaría que guardaras esta carta unos días, vuelve a Canarias donde eres feliz, piensa en lo que dice. No sé lo que has escrito, pero si tienes que leerla, lo harás en unos días con el mismo atril, la misma luz y a los mismos compañeros", le dijo el director de Sálvame. Aunque el contenido de la carta no fue revelado, todo parece indicar que la sobrina de Isabel Pantoja había tomado la decisión de abandonar el programa definitivamente.
Este viernes Carlota Corredera leyó esa carta en directo, sin hacerla pública a los espectadores, y habló abiertamente sobre lo que le parecían las palabras de su compañera: "Hace autocrítica y en algunas cosas es muy dura con ella misma. Ojalá no sea verdad y no se vaya del programa. Me gustaría que ella hiciera un reseteo, pero a lo mejor es verdad que no todo el mundo está preparado para trabajar en este programa. No sería ni la primera, ni la última persona, que se termina bajando de este barco. Yo quiero bien a Anabel, si no es feliz aquí, que la vaya bonito".
La presentadora pudo evitar emocionare y confesó que quiere mucho a Anabel y le duele por lo que está pasando. Carlota preguntó a Matamoros si a él también le da pena que se marche y este contestó con su dureza habitual contra la sobrina de Pantoja: "A mí me da igual. A mi trabajar con ella no me supone un quebradero de cabeza, a veces me resulta desagradable, pero no todos tenemos que comulgar con las ideas de todo. Como persona la respeto profundamente y quiero que la vida le vaya lo mejor posible".
De hecho, el colaborador confesó que él también pasó por un momento parecido en el que no quería acudir a trabajar porque no estaba a gusto en el programa: "Yo necesité un año y medio largo para volver, hubo un momento en el que no era feliz aquí trabajando, no estaba a gusto y también tiene que ver con mi situación personal, pero nadie es ajeno. Y desde luego cuando te llevas de aquí un problema a casa, lo mejor es no venir. Si tiene que venir otra vez la recibiré con los brazos abiertos".