Antes de que saliese a la luz su separación de Bertín Osborne, Fabiola Martínez anunció en sus redes sociales el nuevo reto al que se enfrentará en los próximos meses. La venezolana informó a sus seguidores que se había matriculado en un máster de doble titulación del que no quiso entrar en detalles. A pesar de que continúa siendo presidenta de la Fundación Bertín Osborne, ahora Fabiola ha querido embarcarse en un proyecto que la ilusiona especialmente: comenzar sus estudios de Administración y Dirección de Empresas, que además, combinará con un máster en coaching, inteligencia emocional y programación neurolingüistica.
Tal y como publica la revista Semana, Fabiola no tendrá la necesidad de asistir presencialmente a las clases teóricas, ya que el curso es íntegramente online y podrá estudiar desde la comodidad de su hogar y los horarios no serán un impedimento para llevar a cabo su sueño.
Los estudios por los que la venezolana se ha decantado se imparten en una de las escuelas de negocios más relevantes de Europa: en la Escuela de Negocios Europea de Barcelona y su duración es de un total de 24 meses, curso que, por cierto, ayuda al autoconocimiento, la toma de decisiones o al liderazgo. Fabiola confiesa al citado medio que está "muy ilusionada" con el proyecto. "Aplicaré todos estos conocimientos a la fundación de la que soy presidenta. Además pronto presentaremos un nuevo proyecto, una plataforma online 'Escuela de capacitación para familias de personas con discapacidad'", añade.
De este modo, Fabiola quiere dejar claro que es una mujer independiente y que, aunque seguirá volcada en su trabajo en la fundación así como en el cuidado en sus hijos, su intención es seguir formándose en su vocación de ayudar y orientar a familias a la hora de actuar ante una lesión cerebral.
Hay que recordar que en el pasado Fabiola Martínez abandonó la carrera de medicina y se centró en su trayectoria como modelo de éxito. Sin embargo, en estos momentos tiene claros sus objetivos y desea tener todos los conocimientos necesarios para hacer mejor su trabajo. Además ahora, con su relación matrimonial rota, la venezolana prefiere centrarse en su futuro y no mirar nunca más al pasado.
