La infanta Elena regresó el jueves a Madrid después de haber pasado las últimas semanas en Abu Dhabi visitando al rey Juan Carlos. La duquesa de Lugo es la persona más cercana al emérito en estos complicados momentos para él, y no dudó en volar hasta los Emiratos Árabes para celebrar con su padre su 83 cumpleaños y hacerle compañía cuando se han cumplido 6 meses desde su marcha de España y sin saber aún cuándo podrá cumplir su deseo de regresar a nuestro país.
Sin embargo, y pese a que la expectación era máxima con la llegada a España de la infanta Elena, la hermana del rey Felipe VI no se dejó ver, y fue imposible captar ninguna imagen suya tanto en el aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid Barajas —donde aterrizó rondando el mediodía procedente de Dubai— como llegando a su domicilio, en el madrileño barrio del Niño Jesús.
Así, los numerosos medios de comunicación apostados a las puertas del edificio donde vive la primogénita de los eméritos solo pudieron captar la entrada de su coche al parking, un Volvo azul que no conducía la infanta Elena, que tampoco ocupaba los asientos traseros del vehículo. ¿A dónde se dirigió tras aterrizar en Madrid? Diferentes fuentes apuntan a que su destino habría sido el Palacio de la Zarzuela, para poner a la reina Sofía y a don Felipe al tanto de cómo se encuentra, realmente, el rey Juan Carlos.
A los que sí pudimos ver fue a Victoria Federica y Froilán que, visiblemente molestos por la presencia de cámaras a las puertas de su domicilio, se entretuvieron grabando desde su ventana a los reporteros mientras esperaban la llegada de su madre a casa. Móviles en mano, y con muy mala cara, los hijos de la infanta Elena intentaron evitar a toda costa que les viesen mientras ellos, como si de paparazzi experimentados se tratasen, intentaron esconderse y captar imágenes desde la ventana con sus teléfonos de los reporteros que aguardaban la llegada de la duquesa de Lugo de Abu Dhabi.