Lo sucedido el pasado 2 de agosto en el cortijo de Cantora ya trae consecuencias a Isabel Pantoja. Tal y como se relató en El Programa de Ana Rosa, la cantante lleva en la cama, medicada tras sufrir varias crisis de ansiedad, desde el pasado viernes.
Fue el mismo día de la emisión de Cantora. La herencia envenenada, el programa emitido en Telecinco en torno a un grave testimonio de Kiko Rivera acusando a su madre de diversos delitos relacionados con la finca y la herencia de Paquirri.
"Desde el viernes es una finca fantasma, nadie entra ni sale", dijo la reportera Adriana Dorronsoro desde la misma propiedad de Cantora. Respecto al estado de Isabel Pantoja, todo apunta a que la tonadillera no lo está pasando nada bien. "Ahora mismo está medicada, me cuentan que no sale de la cama desde el viernes y no habla con nadie, ni siquiera con su hermano Agustín Pantoja. Su entorno está muy preocupado por ella", dijo la reportera.
Todo ello pese a que no es seguro que Isabel Pantoja viera el programa televisivo de la discordia. "No sé si vio la entrevista pero le han contado muchas cosas. Hicieron porque no la viese. Está en la cama metida y está en shock, paralizada y catatónica".
Todo ello tras haber sufrido algunas crisis de ansiedad estos días anteriores a la emisión, cuando su hijo Kiko ya apuntaba maneras tras la polémica entrevista concedida a Mila Ximénez en la revista Lecturas y en la que comenzó a sustanciar sus sospechas y acusaciones.