Fidel Albiac y Rocío Carrasco están en el punto de mira de Hacienda. Según publica Lecturas, el marido de la hija de Rocío Jurado debe casi 150.000 euros por el impago del IRPF del año 2015.
Si no paga lo que considera el fisco, la pareja podría perder una importante parte de su patrimonio, incluyendo el chalet donde residen habitualmente.
Un nuevo revés para Rocío Carrasco, que ha mantenido una infructuosa y costosa lucha en los tribunales con su ex, Antonio David Flores, y un pulso mediático con su hija Rocío Flores, ansiosa de una reconciliación sin haber recibido ni un solo gesto de su madre.
A este desgaste se une ahora el varapalo económico de Hacienda, que Rocío y Fidel deberán paliar con nuevos ingresos. La colaboración veraniega de ella con el programa Lazos de Sangre de TVE ha concluido, pero todavía quedan otras vías para obtener dinero. El coronavirus, además, paralizó las funciones de la obra teatral en homenaje a Rocío Jurado, cortando súbitamente esta vía empresarial.
No obstante, a la deuda con Hacienda se une otro problema: un impago que ha provocado el embargo de un terreno y otros bienes en Chipiona.
La solución para el matrimonio sería recrudecer su lucha judicial contra Antonio David, a quien reclama el impago de la pensión alimenticia de sus hijos, los mismos que viven con el ex guardia civil desde la mayoría de edad.
La cantidad, no obstante, ascendería a cerca de 80.000 euros, una parte bastante importante de la nueva deuda adquirida por Fidel y que sin duda lograría dar algo de aire al matrimonio.
Hay que recordar que Antonio David se declaró insolvente, pero su nuevo puesto destacado como colaborador en Sálvame podría poner en evidencia esa situación ante el juez. El padre de Rocío Flores ha sido protagonista de no pocas polémicas y minutos televisivos en los últimos tiempos debido a sus supuestas infidelidades en su matrimonio con Olga.
Eso, o una hipotética vuelta a los platós de Rocío, ahora que existe el exitoso precedente de Lazos de Sangre en TVE, podrían dar un renovado aire a la economía familiar de la hija de Rocío Jurado. Con el coronavirus poniendo freno a no pocas iniciativas empresariales y la inevitable depresión de la economía, el espectáculo podría ser la solución para la pareja.