Tras el violento robo que sufrió la doctora Carla Barber en la puerta de su casa, la canaria ha decidido poner océano por medio y marcharse unos días a su tierra natal, ya que, según ha publicado en sus redes, su corazón necesita sanarse.
Este suceso parece haber marcado un antes y un después en su relación con Diego Matamoros, que aparentaba ir viento en popa hasta hace escasos días. ¿Podrían estar viviendo Diego y Carla su primera crisis?
El periodista Daniel Carande dio la clave en la crónica rosa de Es la mañana de Federico, señalando que tras el Deluxe que se marcó Diego Matamoros dos días después del triste suceso, Carla Barber se enfadó y decidió cortar por lo sano, al menos de momento.
"Ella cogió los bártulos y lleva una semana en Canarias con sus amigas. Estaba muy disgustada por el robo y porque él, el sábado pasado —el robo sucedió un viernes— se sentó en el Deluxe para contar cómo fue el robo, sin decirle nada a ella", dijo el periodista en esRadio.
"Entre ellos había un pacto para no hablar de su relación en un plató y él fue al Deluxe. El domingo ella se fue a Canarias, y estando allí de domingo a miércoles no sabe nada de Diego Matamoros. Él ni coge el teléfono ni nada. El jueves él se presenta en Canarias pero no se ven porque ella no quiere verle. Aunque él ha jugado al despiste poniendo fotos antiguas de Madrid", dice Carande sobre la peculiar cronología de los acontecimientos.
Para Federico Jiménez Losantos, el asunto está claro, y es que tras un verano de amor y muchas, muchas fotografías en redes sociales, Diego Matamoros ha "despachado" a la doctora de esta peculiar manera. "La conclusión es que él ha querido romper y, de paso, llevarse una exclusiva. Le ha dado puerta haciendo pensar que es la otra la que rompe, y cobrando por romper". ¿Una faceta desconocida del hijo de Kiko Matamoros? Al menos para Carla Barber, sí.