Desde que Mila Ximénez fuera diagnosticada con cáncer, la colaboradora de Sálvame decidió llevar su enfermedad con discreción. Tras su retirada temporal del programa, sin embargo, Mila ha hecho apariciones puntuales para explicar su estado.
Y así ha sido en la edición del jueves de Sálvame, conducida por Kiko Hernández, y que ese día cumplía 44 años. Todo en la aparición de Mila desprendía cierta improvisación, sin maquillaje y con el pelo sin hacer. Pero cualquier cosa por felicitar a su amigo Kiko.
"Te quiero mucho y echo de menos, quería decírtelo personalmente y quería darte un abrazo", para a continuación abordar el tema que todo el mundo esperaba: "Estoy bien y voy a estar mejor. Yo también tengo que cumplir años".
Precisamente el próximo miércoles Mila Ximénez vivirá un momento importante en esta lucha contra la enfermedad, una prueba que "si sale bien es que estoy mejor, y si sale mal, como dice María Jiménez, se le saluda".
Mila reiteró que esto "es un tropiezo más, un escalón que hay que subir y lo subo de dos en dos". Dice tener "carácter, alegría, amigos, funcionalidad y muchísimas ganas de vivir".
Y para dar la medida de su optimismo, confesó haber dicho a "María Patiño que incluso quería abandonar el tratamiento, porque no quería vivir como una enferma... Pero de eso nada, necesito levantarme y funcionar".