El vicepresidente Pablo Iglesias y su pareja, la ministra de Igualdad Irene Montero, se encuentran de vacaciones.
Pese a los rebrotes de la pandemia y, sobre todo, los escándalos judiciales en torno al líder Podemos, la pareja está desde el pasado viernes en la localidad asturiana de Felgueras, de menos de 180 habitantes.
Naturalmente, la presencia de Pablo Iglesias e Irene Montero ha revolucionado la vida en el pequeño pueblo. Según publica El Comercio, el objetivo era ante todo buscar "tranquilidad" y huir de la "presión" de los últimos cuatro meses en Galapagar.
Investigado por presuntos delitos de malversación y administración desleal y acosado por el caso Dina, Pablo Iglesias habría escogido esta localidad en busca de un lugar, ante todo, tranquilo.
La familia apenas ha salido de la casa, y de hecho ha pedido comida al restaurante Casa María, cuyos responsables habrían llevado dos potas de comida al alojamiento.
La pareja y sus tres hijos están alojados en la casa del diputado y secretario general del PCE, Enrique Santiago, desde el pasado viernes, y apenas ha salido, aunque Pablo Iglesias sí ha sido visto paseando por las inmediaciones, e Irene Montero haciendo la copra en Pola de Lena.