Ríos de tinta se han escrito esta última a semana a partir del comunicado de Zarzuela anunciando la marcha del rey Juan Carlos en medio de las investigaciones por presuntas comisiones y tras las presiones sobre la Casa Real del Gobierno de coalición.
No obstante, menos se ha dicho (al menos, de momento) sobre la posible naturaleza temporal de este adiós de Juan Carlos, quien de todas formas hubiera acometido este mes de agosto sus tradicionales días de descanso vacacional (hace ya muchos años alejados de Mallorca) como también el núcleo duro de la Familia Real en Marivent.
En la edición del domingo de Viva la vida, en Telecinco, se aseguró que el regreso de Juan Carlos a nuestro país en realidad ya tiene una fecha concreta: el 10 de septiembre. Entonces, el escándalo se habría de momento desvanecido y las investigaciones avanzado, permitiendo a Juan Carlos una entrada en su país de manera discreta. El rey emérito de momento no ha sido imputado de delito alguno.
Esa fecha concreta fue pronunciada por el propio Juan Carlos, si bien en un acto informal y con amigos. La semana pasada y antes de su partida a Emiratos Árabes estuvo cenando en Sanxenxo y allí sacó a colación ese día para su regreso allí mismo, una fecha que marcaría el inicio de una tradicional regata en las aguas gallegas.
Según Viva la Vida, conducido en verano por Toñi Moreno, Juan Carlos daría así por terminada su salida temporal, aunque se da la circunstancia de que la regata que daría inicio el día 11 de ese mes y que podría servir de excusa para ese regreso en realidad ha sido suspendida debido a los avatares causados por el coronavirus.
En todo caso, es el actual rey Felipe VI, su hijo, quien tendría a última palabra para autorizarlo, además del propio Gobierno. Sea no su regreso en esa fecha, en todo caso se deja ya un horizonte de semanas y no se trataría de una huida permanente, como muchos focos mediáticos se han esforzado en subrayar.
Si finalmente se abren diligencias judiciales en el caso investigado, esto se produciría a finales de agosto o primeros de septiembre, informa Voz Populi. En el caso que sea así, Juan Carlos quizá querría estar en nuestro país para hacer frente a las consecuencias. Y en el caso de que no, no habría excusa alguna para que la estancia de Juan Carlos en Zarzuela siguiese perjudicando el prestigio de la institución.