Beatriz Tajuelo cuenta en Semana cómo recuerda su relación con Albert Rivera, ahora que el exlíder de Ciudadanos ha tenido un bebé con su nueva pareja, la cantante Malú.
Dice la empresaria que, efectivamente, "guarda muchos recuerdos" y "la mayoría muy buenos". Echa de menos a algunas personas de esa etapa de su vida, aunque también "me llevé a mucha gente a la que quiero".
La relación, que duró los cinco años más activos como político de Rivera, "se convirtió en una vida". Los define como "intensos" y, "aunque hubo momentos que no me hubiera imaginado, también los hubo felices". Si tuviera que repetir, lo volvería a hacer tal cual.
Pese a estar dolida, reconoce que Albert Rivera, por ejemplo "fue generoso" en muchas cosas, como permitirla llevar la relación con su discreción natural y dar a elegir si salir a actos públicos o no hacerlo. "Siempre me dio la libertad de acompañarle o no. Si era necesario, me lo pedía".
La ruptura, lo dice sin medias tintas, fue "dolorosa para ella". Tuvo el añadido de coincidir con campañas electorales y "veía su imagen cada dos por tres".
Y cuenta una anécdota que en su momento no fue tal. "Voy a contar algo que nunca he contado... En la parada de metro de al lado de mi casa me encontraba diariamente con un póster de tamaño natural de él. Era como si me persiguiera su imagen".
En todo caso, Beatriz Tajuelo, ahora ocupada con varios proyectos empresariales propios, desea suerte a su antiguo amor. "Le deseo la mayor felicidad, ha sido una persona importante en mi vida".