Se estuvo hablando de la boda meses antes de que los novios se dieran el 'Sí, quiero'. Fue, junto a la de Sergio Ramos y Pilar Rubio, la celebración que más interés público atrajo el año pasado. Hablamos de la boda de Belén Esteban y Miguel Marcos, que hoy, un año después de ese maravilloso día, siguen siendo felices pese a las circunstancias.
Y es que el confinamiento por el coronavirus, que Belén ha respetado al máximo por ser paciente de riesgo, ha motivado que haya tenido que vivir separada de su marido, que trabaja en el mundo sanitario, por más semanas de las que querría.
Esa fue la razón para que, en su esperado regreso a los platós este sábado, Belén dijese a Jorge Javier Vázquez que él no había vivido muy de cerca la crisis vírica, criticando duramente al Gobierno. Algo que enfureció al catalán, que llegó a marcharse del plató en una bronca que se ha convertido en "trending topic" y que ha dejado a Belén —según palabras de María Patiño— "muy afectada".
Hace un año la colaboradora de Sálvame decidió celebrar una boda sencilla y privada. La princesa del pueblo puso normas, principalmente que los invitados no llevaran el móvil encima por una única razón: el disfrute de todos sin estar pendiente de las redes sociales y de los mensajes.
Bien es cierto que la princesa del pueblo tenía gestionada una exclusiva con una revista de tirada nacional. También se habló de quiénes saldrían en ese reportaje, pero la Esteban no quiso comprometer a nadie y decidió que cada uno fuera libre a la hora de elegir salir o no.
Finalmente la portada fue ella llegando al altar con un vestido que dejó con la boca abierta a todos. Una boda llena de alegrías, sorpresas, emociones, bailes y mucha fiesta. Lo que siempre había soñado Belén Esteban.
Después de un año de ensueño al lado de su marido, Miguel Marcos, la princesa del pueblo vive feliz, al menos en lo sentimental. Deja atrás un año difícil no solo por el coronavirus sino también por la inesperada muerte de su ex, Fran Álvarez, mientras atravesaba un proceso de desintoxicación.
A pesar de que uno de los deseos de la colaboradora siempre ha sido volver a ser madre, parece que tendremos que esperar para ver de nuevo a Belén Esteban luciendo tripita de embarazada. Y es que ahora, que han estado dos meses separados por el confinamiento, la ganadora de GH VIP y su marido presumen de amor como el primer día.