Lágrimas y mucha emoción en el reencuentro de Rocío Flores y Olga Moreno tras el final de Supervivientes. La empresaria acudió este jueves a recoger a la hija de Antonio David Flores a la estación de Málaga y no pudo contener la emoción cuando se vieron. Un reencuentro muy esperado y con una gran expectación por parte de la prensa, tal y como se puede comprobar en las imágenes y una escena que hace patente la unión que existe entre ambas.
La joven vive con Olga desde que cumplió 16 años y abandonó el matrimonio materno. Rocío siente a la pareja de su padre como el apoyo maternal que siempre le ha faltado. A pesar de todo, nunca ha perdido la esperanza de retomar la relación con su madre, tal y como ella misma ha confesado en más de una ocasión durante su aventura en Honduras.
El pasado 10 de junio se acabó el confinamiento para los concursantes de Supervivientes, que tuvieron que guardar la cuarentena obligatoria para personas que llegan a España desde el extranjero.
Aún con lágrimas en los ojos, Olga y Rocío pusieron marcha al hogar familiar, donde les estarían esperando Lola y David, las dos grandes debilidades de Rocío. Nada más aparcar el coche, la concursante corrió a toda prisa hacia el portal de su casa para ver cuánto antes a sus hermanos.