Ana Obregón y Alessandro Lequio han estado completamente volcados en la recuperación de su hijo Álex Lequio, que no ha podido superar su contra el cáncer. En marzo, tuvo que regresar a casa debido a una drástica decisión de los médicos de la clínica Ruber madrileña donde estaba ingresado debido al implacable avance del coronavirus y a la necesidad urgente de camas para los contagiados.
El joven se encontraba ingresado en un hospital de Barcelona donde recibió un novedoso tratamiento para su enfermedad. Junto a él se ha encontrado su madre, que ha dormido todas las noches a su lado y tan solo ha abandonado el hospital para descansar dos o tres horas en el apartamento que han alquilado.
Tal y como publica la revista Lecturas en su edición de este miércoles, las primeras semanas Alessandro Lequio visitaba Barcelona con asiduidad sin embargo desde hace unos días se ha instalado también en la ciudad para estar con su hijo y con Ana. Entre los dos cubren las 24 horas del día y Álex nunca estuvo solo.
La lucha de Álex comenzó hace dos años cuando en abril de 2018 notó un fuerte dolor de espalda que le dejó una noche en vela y andando de una punta a otra de la habitación, como él mismo confesó en una entrevista. Los médicos le diagnosticaron un cáncer contra el que hoy sigue batallando con todas sus fuerzas junto a su padres, que no se mueven de su lado.