Alberto Chicote está muy indignado con los comentarios de la vicepresidenta Teresa Ribera y, en general, con los planes del Gobierno para reabrir la hostelería. Si la semana pasada en una entrevista en los informativos de Antena 3 calificó el plan de "suicidio empresarial", este lunes ha explicado con más detalle lo que significa la desescalada de Pedro Sánchez en términos de reapertura de bares y restaurantes.
Chicote, que se ha sumado a un comunicado firmado por más de 130 hosteleros de varias provincias, no ha dudado en hablar para la cadena en la que trabaja, y en declaraciones a Espejo Público que no es tan importante el cuándo en la reapertura: "El cómo es muy importante".
Chicote no entiende las declaraciones de la vicepresidenta cuarta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y ha dicho sorprendido: "No es cierto que no estábamos dispuestos a abrir... Pero el otro día las palabras de la ministra en las que venía a decir 'el que no se sienta cómodo que no abra' me pareció muy insultante, porque si no lo hacemos con cabeza al cien por cien miles de puestos de trabajo se irían al traste", advierte.
Chicote no sabe si puede o no puede abrir y que, como él depende del espacio, "habrá gente que pueda porque tenían las mesas a cuatro metros, pero yo que las tengo muy pegaditas y solo puedo abrir a un 20 por ciento... a lo mejor no puede ser". "Las pérdidas pueden ser terribles".
Chicote representa la opinión de muchos más hosteleros. Como él, muchos empresarios de este sector reivindican medidas en las que no se han pensado tras la comparecencia del presidente del Gobierno de 28 de abril de 2020. Es por ello por lo que firmaron este comunicado en el que quieren poner de manifiesto su más profundo malestar con las medidas anunciadas por el Ejecutivo, entre los que se encuentra su portavoz, Alex Pérez, perteneciente al grupo El Escondite.
Sabotaje por sus críticas a Sánchez
Las palabras de Chicote a buen seguro no habrán sentado nada bien a diversos sectores cercanos al Gobierno. El propio Chicote desveló a Susanna Griso un intento de sabotaje durante una retransmisión en directo con El Hormiguero de Pablo Motos, presentador que también se ha ganado el desprecio en redes sociales por sus opiniones desfavorables a la gestión del Gobierno del coronavirus.
Mientras hablaba con Motos —explicó Chicote— la retransmisión comenzó a quedarse en pausa debido a la gran cantidad de llamadas que comenzaron a entrar a su teléfono. "De repente veo que empiezan aparecer números llamándome a mi teléfono y se cortaba la conexión cada dos por tres. En un principio pensé que sería algún gracioso, que los hay muy cafres, pero cuando terminé me di cuenta de que en un espacio tan corto de tiempo había tenido cerca de 40 llamadas de diferentes personas y diferentes números que yo no conocía".
El asunto, que ya está en manos de la Policía y con sus responsables identificados, va a acabar en los juzgados. Y es que "al cabo de dos horas, una persona me escribió para decirme que se sentía muy arrepentido porque en un grupo de WhatsApp de otras personas a las que no conozco, habían organizado un troleo".
Chicote nombra los comentarios donde los responsables del sabotaje informático se descubrieron, y que según el cocinero, "son de traca: 'Venga, vamos a hundir a Chicote y a El Hormiguero, vamos todos". Espontáneas o no, estos fenómenos recuerdan a los sufridos en redes por Iker Jiménez o más recientemente al propio Pablo Motos, fotografiado nada más salir de su portal sin mascarilla tras, precisamente, criticar la falta de consenso sobre su uso por parte del Ejecutivo.