Ya han pasado 15 días desde que el Gobierno decretó el estado de alarma en España y obligó a millones de españoles a permanecer en sus casas. Con unas medidas cada vez más restrictivas para frenar el contagio y con el número de muertos creciendo, todavía hay que mantener sacrificios para frenar la crisis sanitaria que atraviesa el mundo a consecuencia de la pandemia del coronavirus.
Sin embargo, ahora que se está alargando el confinamiento, Shakira se quejó de que los niños no puedan salir a la calle y tengan que pasar horas encerrados en casa. "Conociendo la situación de padres con niños pequeños en este difícil periodo de cuarentena, empatizo con aquellos que no cuentan con un espacio exterior o balcón para que sus niños respiren aire puro", comienza la carta que publicó en Instagram.
"Si está permitido salir a pasear perros o a adultos a comprar, habría que pensar en una solución que otorgue este mismo derecho a los niños, quienes necesitan del sol y el aire para su salud física y mental. Urgiría al Gobierno a que considere una política que permita a un adulto encargado sacar a un niño a pasear, aunque sea sujeto a las restricciones que los expertos consideren y respetándose las normas de distanciamiento y sanidad. Los niños están siendo verdaderos campeones en este drama social y debemos pensar en su bienestar", sentencia.
Shakira es madre de dos niños: Milan, de 7 años y Sasha de 5, fruto de su relación de una década con el jugador del FC Barcelona Gerard Piqué. Al contrario que muchos, la cantante colombiana y su familia pueden disfrutar del aire libre dentro de la zona ajardinada de su casa de Esplugues de Llobregat (Barcelona). La vivienda está construida sobre un terreno de 1.000 metros cuadrados y cuenta con varias zonas recreativas y deportivas.
La nueva carta de Shakira choca con su petición de hace apenas 10 días, cuando trató de concienciar a sus seguidores para quedarse en casa. "Muchos países no están escuchando las recomendaciones sanitarias. Están actuando demasiado tarde o están priorizando lo económico por sobre la vida de la salud de la gente. Mi experiencia habiendo vivido en Europa es que nos hemos dado cuenta de que el virus es muy rápido y nuestros líderes, demasiado lentos. Instemos a nuestros líderes que implementen 15 días de distanciamiento social extremo. El cierre de escuelas y lugares públicos donde la gente se reúne, para aplanar la curva y poder prevenir la extensión del virus especialmente en los países que no están preparados para ofrecer la atención médica, como en América Latina o África", dijo en un vídeo en su perfil de Instagram.