El testamento de Camilo Sesto ha puesto en el foco mediático a su único hijo, Camilo Blanes, fruto de una relación con la mexicana Lourdes Ornelas. A sus 36 años se ha convertido en el heredero universal de los bienes y propiedades que dejó el artista, una importante ayuda económica con la que podrá vivir de forma desahogada. Todo lo que se sabe de la vida de Blanes es lo que las dos versiones ofrecidas por sus padres y otros allegados han querido contar.
El intérprete de Vivir así es morir de amor siempre aseguró que la inesperada llegada de su hijo supuso una alegría para él, a pesar de que la relación con Lourdes se complicaba cada día más. Siendo niño, Camilo abandonó México y se instaló con su padre en España, ya que el cantante consiguió la custodia del niño con el consentimiento de la madre, según su versión. Años después, la propia Lourdes denunció que nunca dio el visto bueno y acusó a Camilo Sesto de poner trabas para que la relación madre e hijo fluyera. Como su padre, Camilín decidió probar suerte en la música y regresó a México, aunque nunca alcanzó el éxito del progenitor.
La salud del artista alcoyano empezó a empeorar a finales de 2018 y en sus apariciones públicas lucía un aspecto físico muy desmejorado que preocupó a sus seguidores. Fue entonces cuando Lourdes Ornelas aprovechó para realizar duras acusaciones contra él: desde que Camilín sufrió depresión por culpa de su padre hasta acusar al cantante español de ser un alcohólico, lo que habría debilitado su físico. Un feo que Camilo Jr. no le perdonó y que incluso les distanció.
Lourdes Ornelas se ha encargado de sacar los trapos sucios de la familia y, recientemente, la revista Diez Minutos rescató una entrevista sin publicar en la que la mexicana aseguraba que su hijo está "enfermo". "Mi hijo, cuando bebe, se pierde. Necesita ayuda, pero su padre es cobarde", aseguró. También reveló los problemas psicológicos que su hijo ha arrastrado durante años. "Mi hijo ha visto muchas cosas. Ha visto a Camilo vestido de mujer, parado en mi habitación…. No te puedo contar detalles (…) Camilo empezó a tener hábitos poco saludables y su carrera se empezó a venir abajo".
Esta versión coincide con la de su exnovia Christina Rapado, que concedió una entrevista a Pronto en la que recuerda las noches de desenfreno, sexo y pasión con Camilín. La colaboradora de televisión confiesa que cuando lo conoció en 2007 en una sala nocturna, no tenía dinero, pero se fijó en él sin conocer su apellido. "Era muy guapito, nos dimos unos besos y acabamos practicando sexo en la casa de un amigo mío. Y la verdad es que Camilín funciona muy bien en el sexo". Cuenta Rapado que Camilo vivía en un piso de alquiler con unos chicos sudamericanos y estaba "sin un duro". "Su padre no le daba nada, pasaba muchas estrecheces... Para ganarse un dinerito pintaba casas".
Lo suyo solo duró tres meses y entonces se publicó que fue Christina quien le llevó por la mala vida. Ella lo niega: "Apareció en mi vida con malos hábitos y muchos problemas familiares. En mí encontró a una persona que le quería y le ayudaba". La colaboradora cree que su madre siempre le ha controlado demasiado, pero coincide con ella en su "problema con la bebida". "Tenga cuidado, porque cuando su hijo se toma una copa, es incapaz de parar. Su talón de Aquiles era la bebida".
Con la herencia de su padre podrá dejar atrás todo aquello, aunque de él dependerá mantener un estilo de vida saludable. En las sociedades que pertenecían al artista antes de su muerte hay un efectivo de 170.000 euros. En sus cuentas personales, algo más de 1,2 millones de euros, más de 300.000 euros en fondos de inversión y una cantidad similar que puede aparecer tras la correspondiente investigación que deberá realizar la parte interesada. En total, un efectivo cercano a los 2 millones de euros.
Además existen cuatro propiedades inmobiliarias. La casa de Torrelodones donde vivía el artista, en la que pasó la mayor parte de su vida y donde se encuentran gran parte de sus pertenencias. Otra parcela de 2.500 metros cuadrados en la misma urbanización, un chalet con su correspondiente terreno en La Chopera de Las Rozas, muy cercana a las anteriores, y una casa en Marbella donde solía veranear Camilo Sesto.
Cabe destacar que los éxitos musicales del cantante siguen generando beneficios. Trimestralmente recibe liquidaciones en torno a los 50.000 euros, lo que supone una suma de 200.00 euros anuales. La revista recuerda que las cifras se van a disparar porque las ventas y descargas de su música están en alza tras su fallecimiento.
También tienen un gran valor sus objetos personales, desde discos de oro, sus cuadros, las letras de sus canciones de su puño y letra, así como el vestuario de los momentos clave de su vida.