Es Paula Vázquez una de las más atractivas presentadoras de televisión que también probó fortuna en el cine, aunque fuera circunstancialmente. Su cuerpo glorioso lo lució también en varias revistas, dejando por sentado que no le daba mucha importancia a mostrar esos encantos. Incluso en la pequeña pantalla, donde como puede suponerse comparecía con ropajes más discretos, también hubo al menos una ocasión que recordemos cuando se exhibió en traje de baño. Ferrolana, nacida hace cuarenta y cuatro años, Paula Vázquez ha compaginado sus facetas de modelo, presentadora y actriz. De las cuáles su trabajo más constante y reconocido ha sido ante las cámaras de televisión.
Podría decirse que ha pasado por todas las cadenas importantes, desde la 1, Antena 3, Telecinco y Cuatro. En la temporada 1993-94 fue descubierta por Chicho Ibáñez Serrador, ejerciendo de azafata en Un, dos, tres..., cuando el popular programa-concurso lo presentaba José María Bachs. Siempre ha sido muy ambiciosa. Y sincera. Tal vez por algunas manifestaciones en la prensa, quizás por prestarse a reportajes donde no ocultaba sus encantos físicos, o quién sabe si no se prestó a ciertos requirimientos, el caso es que Paula Vázquez tuvo problemas en Televisión Española y tuvo que renunciar a su trabajo de presentadora. "Una mano negra me quitó de la programación". Y no aportó más detalles que ayudaran a conocer las causas de aquella intempestiva salida. Claro que encontró otras cadenas para proseguir su carrera. Por ejemplo, en Antena 3, donde entre 2003 y 2005 animó el espacio La isla de los famosos S.O.S, pionero en lo que luego ha sido en Telecinco Salvados, o Supervivientes. Allí, la galleguiña salía en biquini, para regocijo de los espectadores varones, con esa anatomía que la Naturaleza le ha proporcionado y una ancha sonrisa, marca de la casa.
Paula Vázquez es muy simpática, como comprobé en cierta ocasión que fui su vecino de mesa en una cena. Es su arma de entrada, con la que ha conquistado a más de un admirador, de los que han participado de su intimidad. No es Paula Vázquez muy proclive a airear su vida íntima, por mucho que se haya desnudado para revistas como Interviú, Man, DT, FHM y algunas otras. Que una cosa es someterse a sesiones fotográficas artísticas y otra pregonar sus amores. Pero siempre, los pertinaces "paparazzi", de los que ha huido cuando le ha sido posible, han destapado sus romances, tanto si fueran de corto recorrido como otros de más consistencia. Los nombres de quienes han pasado por su vida fueron, entre otros, los siguientes: Guti, el jugador madridista; el baloncestista Sergio Luyk (hijo de Clifforf Luik y Paquita Torres, Miss Europa); el director de programas Joaquín Zamora; un técnico de televisión, Germinal Torremocha; y un francés y un alemán cuya identidad tampoco es relevante. Parece que en estos momentos su corazón está más tranquilo.
Quienes aparecen a menudo en televisión suelen ser objeto de mayor atención popular que los profesionales del teatro o el cine. Y Paula Vázquez fue víctima de un enloquecido que le enviaba mensajes y amenazas, hasta que pudo ser detenido. Acosador que la tuvo un tiempo muy preocupada. Bien por ese incidente o por otras cuestiones personales, lo cierto es que permaneció tres largos años ausente de la pequeña pantalla, de toda actividad profesional, aislada, sin aparecer en público. Prolongado periodo en los que sufrió una aguda crisis, que hubo de afrontar siguiendo un tratamiento adecuado. Superada esa depresión pudo reanudar sus actividades. Prueba de que Paula Vázquez es una presentadora cotizada lo demuestra haber sido captada por la productora norteamericana de Sylvester Stallone, contratándola para una serie, lo que le permitió desplazarse a Los Ángeles, aunque no tuvo oportunidad de conocer personalmente al creador de "Rambo". Fue la primera española en trabajar para la multinacional Netflix, en 2017. Al año siguiente fue Movistar la compañía con la que filmó un "reality" titulado El Puente. Y después animó un concurso de baile, Fama. Y por ahora, no le faltan oportunidades de seguir sus programas televisivos.
Dado su afán de probar su aptitud como actriz debutó en 2001 en una coproducción hispano- italiana, Últimas vacaciones. Viajó a Roma y en esa película tuvo que rodar una secuencia tórrida, metida en la ducha junto a uno de los hijos de Vittorio de Sica y la española María Mercader, Christian. Esa cinta no sabemos si llegó a estrenarse en España, en cualquier caso no le sirvió a Paula para acreditar sus posibles facultades en el cine. En YouTube pueden contemplarse tales imágenes en las que se la ve desnuda de medio cuerpo. Su segundo intento en la gran pantalla, Kibris, en 2004, tampoco le aportó mucho. Desde entonces no ha repetido la experiencia. Paula Vázquez se ha comportado desinhibida ante sus entrevistadores, a quienes, por ejemplo, les ha dicho cosas como que "consume porno online". Y a su vez se suele lamentar de que no se cuentan sus trabajos artísticos y en cambio parece que sólo interesara más a las publicaciones su figura "sexy". Le han inventado novios, como cuando iba del brazo de su padre o de su hermano, sin contar con la humorada de Alfonso Ussía, que la relacionó con un líder político de izquierdas, lo que ella desmintió rotundamente. Hay un asunto muy personal que redactamos con el mayor respeto. Fue cuando, al no tener hijos, decidió congelar sus óvulos en una clínica especializada en la cuestión. Por si el día que le parezca oportuno encuentra el hombre adecuado con el que fecundarlos y así, ser madre. Ese momento aún no ha llegado a su vida.