A poco más de un mes para que se celebren las elecciones, el presidente del PP, Pablo Casado, ha concedido una entrevista a la revista Telva junto a su mujer, Isabel Torres. En ella, hablan de cómo se conocieron, cuáles son las claves de su relación o cómo es el día a día familiar de un candidato a la presidencia del Gobierno.
Así, explican que la decisión de que Casado se presentara a la presidencia del Partido Popular la tomaron entre los dos porque implicaba que, si ganaba, en algún momento sería candidato y eso supondría, como así ha sido, una revolución familiar. "Ella estaba dispuesta a sacrificarse para defender los principios, valores e ideas que compartimos. Ella me apoya, además de porque me quiere mucho, por sentido de responsabilidad. Es una patriota", cuenta el líder del PP.
Su mujer revela, por su parte, que aunque nunca ha intentado disuadirle, no es especial amante de la política y que siempre ha tenido "la esperanza de que Pablo se dedicase a otra cosa" porque es "un mundo desagradecido, sacrificado y en el que jamás recibes lo que das". Sin embargo, explica que, "con el tiempo", se ha dado cuenta de que "lleva la política en la sangre".
Sus momentos más difíciles
Llevan juntos desde los 20 años pero el punto de inflexión en su relación llegó hace cinco años con el nacimiento de su hijo Pablo. Nació con 730 gramos de peso tras solo 22 semanas de gestación. "Desde entonces admiro mucho más a Isabel. Ese sufrimiento nos unió muchísimo, tuvimos que tomar decisiones muy serias", cuenta el líder del PP. "A mí me decían, piensa en tu hija, le vas a amargar la vida si esto sale mal… La incertidumbre fue tremenda pero lo luchamos y salió bien. Hoy Pablo es un niño completamente normal", explica su mujer.
Sus hijos, Paloma y Pablo, son parte fundamental de su vida. Desde hace ocho meses, la rutina en su casa ha cambiado radicalmente aunque intentan que sus hijos no lo noten demasiado. Pablo Casado cuenta que desayuna todos los días con ellos y que siempre que puede les lleva al colegio. Así, ambos explican que han contado a los pequeños, de 7 y 5 años, que su padre "participa en un concurso y que por eso está menos en casa". "Me preguntan todos los días si he ganado ya", admite el dirigente popular.
Precisamente, su experiencia con su hijo pequeño ha servido para unir a Pablo Casado con Pablo Iglesias e Irene Montero. Ambos tuvieron a sus mellizos también de manera prematura y el líder del PP explica que durante estos meses "han estado cerca de ellos y he descubierto dos padrazos. Estamos en las antípodas en muchas cosas, pero me quito el sombrero por cómo les están sacando adelante".
Aznar y Rajoy son mas "exjefes" que "amigos"
Durante la entrevista también hay tiempo para hablar de política. Le preguntan por su relación con José María Aznar y con Mariano Rajoy y si se considera amigo personal de ambos. Su respuesta no deja lugar a dudas: "Pues no sé si me considero amigo de mis exjefes. Lo que sí creo es que he tenido la suerte de trabajar con los dos".
Ambos expresidentes del Gobierno han chocado en más de una ocasión y, durante la última etapa de Rajoy, Aznar fue muy crítico con el Partido Popular al que ahora "ha vuelto" tras la victoria de Pablo Casado. Sin embargo, en esta ocasión, el líder del PP prefiere obviar la polémica. "La primera reunión que tuve en mi despacho fue con los dos. Y la primera visita que recibiré fue la de Aznar y Rajoy", zanja.
También habla sobre sus adversarios políticos más directos: Albert Rivera y Santiago Abascal. Le piden tres defectos y tres valores. Sobre ellos Casado cree que "tienen el mérito de haber lanzado un proyecto político de cero y una expectativa de voto interesante. La parte negativa es que sus partidos no tienen ninguna experiencia de gestión y les sale gratis opinar".