Toñi Moreno no supera la drástica decisión de Paolo Vasile de cambiar su puesto por el de Emma García para ocupar su puesto en Mujeres y Hombres y Viceversa en lo que entendió como un premio a la presentadora vasca por su larga trayectoria en la cadena, que pasó a presentar el magacine Viva la vida. Aunque Toñi Moreno encaró el desafío con positividad, los resultados de audiencia no son tan buenos como ella esperaba.
El programa se hunde en Cuatro y durante la semana pasada tan solo obtuvo un 2,9% de cuota de pantalla. Una situación que, según apunta Jaleos, ha provocado que la presentadora lo esté pasando "realmente mal", sintiendo la necesidad de desahogarse detrás de las cámaras con sus personas de confianza: "Toñi está muy triste, es lógico que la situación la entristezca", explica al medio una persona cercana a la cadena. "Echa de menos su Viva la vida, ya no por las audiencias más animadas, que también, sino por la visibilidad. No nos engañemos, eso es un estímulo", cuentan también.
Esta semana el programa hizo público la vuelta de uno de sus tronistas clásicos para levantar las audiencias del programa. Una medida desesperada de Paolo Vasile para volver a los orígenes del programa. Para ello volverán a contar con Efrén Reyero, quizá el concursante más famoso de la historia del programa y cuya final reunió a un 27% de la audiencia en Telecinco.
El tronista protagonizó una de las salidas más polémicas que se recuerdan en la cadena. Atresmedia ofreció un contrato a Efrén, y éste decidió abandonar la televisión que le había hecho famoso: "La otra cadena me ofrecía mucho reality, mucho dinero. Pero Antena 3 me ofrecía un proyecto de futuro, serio. No me lo pensé mucho porque quiero que la gente me conozca por un trabajo serio", confesó por aquel entonces Reyero. "El momento Efrén fue una gran decepción y un gran palo para todos", comentó Emma García en 2009. Parece que tanto la cadena como el concursante han olvidado sus rencillas del pasado y vuelven a unirse para intentar repetir el éxito de hace años.